Visitar Alta Gracia en un día (o en pocas horas, como fue mi caso) es uno de los paseos más lindos que hacer en Córdoba. Llegar a Alta Gracia es muy fácil tanto desde Córdoba Capital (40 minutos) como desde Villa Carlos Paz (35 minutos) y desde ambas ciudades hay tours, en caso de que no cuenten con movilidad propia.
Alta Gracia está a unos 550 msnm, protegida de los vientos del Oeste por bajas sierras, rodeada de vegetación arbustiva típica de esta región donde las lluvias no son abundantes y el agua es un recurso escaso. A minutos de la ciudad se encuentran pueblitos y rincones naturales de enorme belleza (como La Cumbrecita o los valles de Punilla y Calamuchita), pero el principal atractivo de Alta Gracia es su historia.
Mi primer contacto con el pasado jesuita de la provincia de Córdoba fue hace unos años en la «Manzana Jesuítica» de Córdoba Capital. Pero no fue hasta este año, cuando visité Alta Gracia, que logré entender mejor lo que los jesuitas representaron para esta región del país. Más allá de lo que podamos pensar hoy de los métodos de evangelización en la época colonial, no podemos negar que el legado jesuita en Córdoba constituye uno de los principales atractivos de turismo cultural… porque Córdoba es mucho más que sierras 🙂
Legado jesuita en Alta Gracia
La ocupación española en la zona de Córdoba empieza durante el último cuarto del siglo XVI. En 1573, la corriente colonizadora que se dirigía al Sur desde el Alto Perú llega a la región central de la actual Argentina y funda la ciudad de Córdoba de la Nueva Andalucía, desde donde partirían distintas expediciones. Los jesuitas, integrantes de la Compañía de Jesús, expandieron su influencia en la zona originalmente habitada por los comechingones durante la primera mitad del siglo XVII.
Para el año 1653, Alta Gracia no era más que una estancia jesuita junto a la cual los religiosos hicieron construir un Tajamar. Esta especie de dique -que aún se preserva- cumplía la función de albergar agua para riego y así cultivar la tierra. Varias de las obras hidráulicas que dejaron los jesuitas en la zona central de Córdoba, como las acequias y canales subterráneos, aún se utilizan para sus fines originales.
Por supuesto que estas obras se concretaron a costas del trabajo esclavo. En la zona central de Alta Gracia se encontraba «La Ranchería», que servía de residencia para los esclavos. Hoy no quedan rastros de esa construcción, pero sí de la Residencia desde donde la Estancia Jesuítica era administrada. Esto está en el centro de Alta Gracia, frente a la Plaza Solares.
La misión jesuítica en Alta Gracia termina en la década de 1760 en consecuencia a la expulsión de los jesuitas del continente americano. Los esclavos fueron enviados a la ciudad de Córdoba y la Estancia Jesuítica quedó abandonada. Durante las siguientes décadas varias personas intentarían administrar la Estancia, cosa que lograría el Virrey Liniers. No obstante, tras su fusilamiento años más tarde, el futuro de la Estancia permanecería incierto hasta 1820, cuando se la adjudicaría a Don José Manuel Solares. Pueden consultar la historia de Alta Gracia en más detalle en la página de la ciudad.
La posesión de la Estancia Jesuítica terminaría definitivamente en enero de 1900 con la creación del Municipio de Alta Gracia. La Estancia fue entonces dividida y lentamente urbanizada, manteniendo construcciones originales de los jesuitas, como la Iglesia Nuestra Señora de la Merced, la Residencia, el Santuario de la Virgen de Lourdes, el Tajamar, y la Torre del Reloj. Todos estos atractivos se pueden visitar en pocas horas en la ciudad.
Qué ver en Alta Gracia en pocas horas
Se puede visitar Alta Gracia en menos de un día desde Villa Carlos Paz o Córdoba Capital (o desde cualquier otro pueblo turístico del Valle de Punilla o del Valle de Calamuchita, claro). Ya sea que viajes a Alta Gracia por cuenta propia o en un tour desde alguna otra localidad, el primer punto a visitar son los alrededores de la Plaza Solares. Este es el sector más antiguo e interesante de la ciudad.
CASCO HISTÓRICO
El casco de la antigua Estancia es el principal icono de la ciudad y, definitivamente, uno de los lugares que ver en Alta Gracia. Está frente a la Plaza Solares y se la puede visitar tanto por libre como en visitas guiadas. Fue convertida en Museo Nacional e invita a viajar en el tiempo en cada una de sus salas, que mantienen mobiliario y objetos originales que nos permiten tener una idea de cómo fue la vida en la misión y hasta el siglo XIX.
La manzana es compartida con la Iglesia de Nuestra Señora de la Merced, a menudo descrita como uno de los templos más lindos de Argentina. Al otro lado de la Calle Padre Viera (que se convierte en la Avenida Belgrano y calle principal de Alta Gracia) resalta la Torre del Reloj, junto al Tajamar.
El lago del Tajamar y el parque que lo rodean son una postal imperdible de Alta Gracia. A pasos de ahí se puede visitar también el Paseo del Virrey y la Casa de la Cultura.
El centro de Alta Gracia en sí no es gran cosa, pero al prestar atención a los detalles arquitectónicos de las fachadas se vuelve muy interesante.
MUSEOS EN ALTA GRACIA
Alejándose unos minutos del centro se encuentran los demás museos de Alta Gracia. Estos son:
- Museo de Arte Gabriel Dubois (Gabriel Dubois 343): para conocer la vida y obra del escultor Gabriel Dubois.
- Museo de Manuel de Falla (Pellegrini 1101): museo dedicado al compositor español Manuel de Falla, quien se radicara en Alta Gracia en la década de 1940 para pasar sus últimos años de vida.
- Muso del Che Guevara (Avellaneda 501): ubicado en la llamada «Villa Nydia», una de las residencias de la familia Guevara, donde este personaje pasó parte de su infancia y adolescencia.
Alta Gracia ofrece un pase de museos que permite acceder a estos tres museos. Para más información sobre estas visitas y cada uno de estos museos, les dejo el enlace al sitio de turismo de Alta Gracia.
Qué hacer en los alrededores
Las sierras están al Oeste. Apenas se sale de la zona más urbana de Alta Gracia, bordeando el Arroyo Los Paredones (junto al cual se encuentran varios recreos y campings), se puede visitar el Santuario de la Virgen de Lourdes. El mismo está en un gran predio de parques, donde también hay una gruta dedicada a la misma figura. Cuenta la leyenda que en ese lugar suele hacerse presente la Virgen María, pero más allá del aspecto espiritual del lugar este no deja de ser uno de los lindos rincones que visitar en Alta Gracia.
Siguiendo rumbo al sur, la Ruta Provincial 5 invita a adentrarse en el Valle de Calamuchita. Se trata de una ruta escénica, de las más lindas de Córdoba, que dirige a los viajes hasta el Embalse Los Molinos. Pero primero pasa junto a pequeñas villas turísticas a minutos del centro de Alta Gracia, junto al Río Segundo: Villa Serranita y Villa Los Aromos.
- Si tu intención es una escapada de fin de semana a Alta Gracia, estas zonas (y los alrededores de la ciudad en general) tienen una gran oferta de cabañas, hosterías y estancias donde dormir. Te invito a consultar este enlace con todo sobre alojamiento en Alta Gracia.
El Embalse Los Molinos, a 29km de Alta Gracia, es el principal cuerpo de agua de la zona. Pueden practicarse deportes acuáticos, disfrutar de las vistas desde los miradores junto a la ruta 5, y visitar las cercanas localidades turísticas de Los Reartes y Villa General Belgrano.
Por supuesto que la estrella del Valle de Calamuchita es La Cumbrecita, pero sobre eso te cuento en mi post Qué ver en La Cumbrecita en un día 😉
Visitar Alta Gracia en excursión
Ya sea desde Villa Carlos Paz o Córdoba Capital, tomar una excursión a Alta Gracia es una buena forma de conocer esta ciudad. En mi caso, lo hice desde Villa Carlos Paz en un tour de día completo a La Cumbrecita, que incluía paradas en Alta Gracia, el Embalse Los Molinos, y Villa General Belgrano. Pero existen tours de medio día solamente a Alta Gracia con precios promedio entre USD 16 y USD 20 por persona. En este enlace pueden consultar por tours a Alta Gracia desde Córdoba Capital y, a continuación, ver cómo son las excursiones de día completo desde Villa Carlos Paz 😉
Espero que este post sobre qué ver y qué hacer en Alta Gracia te haya resultado útil. Ya sea una escapada de fin de semana o una visita de pocas horas, espero que disfrutes de esta histórica ciudad cordobesa. ¡Buen viaje! 🙂
