Tras nuestro breve paso de 2 días en Lisboa, un vuelo de hora y media desde la capital portuguesa nos condujo a la la isla de Madeira. Pasaríamos un total de 7 días en Madeira, recorriendo sus pueblos, escalando sus cerros, nadando en sus piscinas naturales y deleitándonos con su vegetación y aves. En este post te cuento todo lo que necesitas saber para planificar tu viaje y conocer Madeira en 7 dias.
Cómo llegar a Madeira
La isla de Madeira se ubica a poco menos de 1000 kilómetros de Lisboa, y unos 700 kilómetros al oeste de la costa de Marruecos. La única forma de llegar es en crucero desde los principales puertos de Europa continental, en ferry desde Santa Cruz de Tenerife, o en avión. Su único aeropuerto está en Funchal, su capital y ciudad más poblada.
El aeropuerto de Funchal lleva el nombre de su ciudadano más célebre, Cristiano Ronaldo. Durante todo el año opera vuelos a Madeira desde Europa, principalmente desde Lisboa, Oporto, y las principales ciudades de España, Francia, Reino Unido, y Alemania. La lista actualizada de aerolíneas que sirven al aeropuerto de Funchal puede ser consultada aquí.
Volar a Madeira es una experiencia notable para cualquier aficionado de la aviación. Dada la geografía extrema de la isla, parte de la pista de aterrizaje está sostenida por 180 pilares de más de 100 metros de altura total. Cabe destacar que los pilotos deben tener entrenamiento especial para volar desde y hacia Madeira, y no cuesta entender por qué.
Geografía y clima de Madeira
Madeira es un archipiélago de cinco islas principales, todas de origen volcánico: Madeira (la más grande y más poblada), Porto Santo (una pequeña isla poco poblada con lindas playas), y tres islas deshabitadas que son una reserva natural. Estas últimas reciben el nombre de Islas Desiertas, dado el tipo de clima que las caracteriza.
La isla de Madeira ocupa unos 800km² pero se siente más grande de lo que es. Sus empinadas montañas, filosos acantilados, y diversa vegetación hacen que el norte de la isla sea distinto al sur en cuanto a clima y vegetación. El norte es, en promedio, 2°C-3°C más templado que el sur, y también más frondoso y húmedo. Esto a pesar de que, entre la costa norte y la sur, hay menos de 30 kilómetros.
Madeira es una isla rocosa y frondosa. Su nombre significa, literalmente, «madera». El clima es subtropical y templado la mayor parte del año, con temperaturas más altas en verano. Por su topografía montañosa, carece de playas de arena naturales, y el mar gana profundidad muy rápidamente. La temperatura promedio del mar alrededor de la isla oscila entre los 24°C y 16°C entre el verano y el invierno, respectivamente.
La mejor época para viajar a Madeira es el verano, más cálido y seco. Esta es también la temporada alta. Por mi parte, visité Madeira la primera semana de febrero y, aunque la época lluviosa se concentra entre los meses de octubre y marzo, no pude haber tenido mejor suerte con el clima 😎 Madeira en invierno, si tienes suerte con el clima, es un paraíso ideal para escapar del gris y frío norte europeo. Y hay poco turismo.
Cómo moverse por Madeira
Las localidades más pobladas de la isla son Funchal, Santa Cruz, Câmara de Lobos, y Machico, todas ubicadas en el lado sur. Funchal es la capital de la Región Autónoma de Madeira y la que concentra la mayor infraestructura urbana: hospital, centros comerciales, institutos, museos, etc. En general, todo el sur de la isla está cubierto por zona urbanas más y menos densas. La urbanización tuvo un boom en las últimas décadas tras la explosión del turismo (industria de la que viven el 75% de los madeirenses), y los viejos centros urbanos comprimidos entre las montañas al borde del mar se expandieron en un mar de casas y apartamentos en las laderas y cimas circundantes.
El norte de la isla está menos poblado, consecuencia de su geografía más dramática. Santana, São Vicente, y Porto Moniz son las principales localidades. La infraestructura urbana es reducida, limitada a los servicios básicos, pero las conexiones con Funchal siguen siendo buenas. De hecho, el litoral de la isla es recorrido por la ruta ER101 que conecta todos los poblados en tramos que varían entre autopistas y carreteras. Las montañas son atravesadas por túneles que reducen los tiempos de viaje al punto de que nunca estarás a más de 90 minutos en auto del punto más lejano en la isla.
Para moverse por Madeira es ideal rentar un auto. La recomendación es que se trate de uno automático y con motor lo suficientemente potente para afrontar las empinadas calles (en algunos casos con pendientes de 45°). Conducir en Madeira no es la experiencia más sencilla: las calles en los barrios de montaña no están en el mejor de los estados, algunos caminos son demasiado angostos, y los accidentes por turistas inexpertos son comunes. Sin embargo, rentar coche en Madeira te permitirá prescindir del transporte público y explorar la isla a tu ritmo y preferencia.
Pero sí que existen opciones para disfrutar Madeira sin coche. Empresas de autobuses como Horários do Funchal, Rodoeste y SAM (Sociedade de Automóveis da Madeira) operan rutas regulares a todos los puntos de interés de la isla.
Dónde alojarse en Madeira
Según mi experiencia, hay tres opciones donde alojarse en Madeira:
- Hospedarse en alguna de las principales localidades. Especialmente en Funchal, las conexiones de transporte público a otros puntos de la isla son suficientes para no necesitar rentar un coche en Madeira. Hay también servicios y atracciones a distancia caminable. Pero el ambiente será urbano y no necesariamente relajante.
- Hospedarse en localidades pequeñas cerca de los centros urbanos. Los barrios esparcidos entre las montañas y el mar, al sur de la isla, están a minutos de la autopista que conecta todas las ciudades de Madeira. En mi caso me alojé en un apartamento cómodamente ubicado entre Santa Cruz y Funchal. El ambiente en estas zonas es mucho más relajado, con pequeñas tiendas de conveniencia para abastecerse de lo necesario, pero también algunos restaurantes y cafés distribuidos aleatoriamente. Contar con un coche de alquiler será necesario para mayor comodidad.
- Hospedarse en las montañas. Lejos de los centros urbanos, en Madeira hay muchas opciones donde alojarse en total soledad. Este tipo de alojamientos los encontrarás más fácilmente por plataformas como AirBNB. En este caso definitivamente necesitarás rentar un coche en Madeira.
En general, la temporada invernal es muy económica para visitar Madeira. Los precios de los alojamientos suelen ser mucho más accesibles que durante la temporada alta y, en muchos casos, hasta se hacen descuentos por estadías semanales. En el mapa a continuación podrás consultar los precios de hoteles, apartamentos, y otros tipos de alojamiento en Madeira.
Ten en cuenta que la Región Autónoma de Madeira aplica un impuesto al turista (llamado Eco Tax) de EUR 2 por persona, por noche. El dinero financia un fondo exclusivamente para manutención de la infraestructura turística de la isla. El pago del mismo se hace por transferencia bancaria o al llegar al alojamiento.
Itinerario de viaje por Madeira en 7 dias
Vale la aclaración de que Madeira es, cómodamente, un destino donde pasar más de una semana si se quiere hacer muchas rutas de senderismo, actividades de ecoturismo, y recorrer bien los pueblos. El siguiente itinerario se basa en experiencia de 7 dias en Madeira. El mismo cubre la mayoría de puntos de interés que son imperdibles al visitar la isla, incluido el circuito de montaña más famoso: la subida al Pico Ruivo.
Todos los puntos que mencionaré a continuación están marcados en este mapa. Ahora sí, sin más preámbulo, les comparto nuestro itinerario para recorrer Madeira en 7 dias, con consejos para cada ocasión 😎
1. Achadas da Cruz & Porto Moniz
Achadas da Cruz es uno de los miradores más impresionantes en Madeira. Ubicado al noroeste de la isla, brinda vistas perfectas del escarpe rocoso con dramáticos acantilados al mar. Pero lo más interesante es mirar hacia abajo, donde se vislumbra el poblado agrícola de Fajã da Quebrada Nova. En él viven pocas decenas de personas, desconectadas del resto de la isla. No hay vía terrestre ni marítima para llegar al sitio, y la única opción para llegar al diminuto pueblo es con el teleférico que se encuentra junto al mirador.
Vale absolutamente la pena tomar el teleférico hacia el pueblo. Cuesta unos EUR 5,00 por persona. En más o menos 5 minutos, el teleférico desciende más de 700 metros hasta el nivel del mar con una pendiente del 98%. Una vez ahí, no hay mucho que hacer más que caminar entre los campos agrícolas, asombrarse con los acantilados, y parar en un jardín holístico donde sirven desayuno y almuerzo a voluntad. La vibra es de las más relajantes que sentí viajando. Personalmente me encanta detenerme en lugares donde me maravilla la belleza de lo simple pero, si esto no es de tu interés, puedes prescindir de la visita al pueblo y seguir camino a Porto Moniz.
En ruta a Porto Moniz vale la pena detenerse en el Miradouro da Santinha. Este mirador contiene una pequeña gruta con una virgen y, por supuesto, la vista es espectacular. Una vez en el pueblo, el atractivo son las piscinas naturales.
Hay dos sectores donde estas piscinas naturales fueron convertidas en balnearios. Uno es público y de acceso gratuito y el otro es público pero de acceso arancelado (EUR 3,00 por persona por todo el día). En el segundo hay instalaciones y servicios de baño, lockers, duchas y cambiador. Pero, en definitiva, son lo mismo.
En las piscinas naturales de Porto Moniz se puede nadar tranquilamente. Parte del área fue nivelada con concreto para facilitar la movilidad, y otra parte permanece natural y original: con las rocas volcánicas que forman estas piletas. Se puede nadar entre peces y ver a los cangrejos en las rocas, así que no olviden el snorkel 😉
Al terminar el día encontrarán opciones donde comer en Porto Moniz, pero también podrían seguir ruta hacia el Este. A pocos minutos en auto se llega al Miradouro Ilheus da Ribeira da Janela. El atractivo son altas columnas de roca aisladas del resto de la isla, que le dan un aire místico a la playa.
Al norte de la isla también encontrarán piscinas naturales en la localidad de Seixal. Estas son más pequeñas que las de Porto Moniz, y sin servicios. Este poblado es también considerablemente más pequeño. Si buscan un lugar auténtico y con pocos turistas, es una gran opción. Pasarán por este pueblo si emprenden regreso en dirección a Funchal por el norte. En este caso, no olviden detenerse en el Mirador del Velo de la Novia para apreciar la cascada homónima que cae directo al mar.
2. Ponta de São Lourenço & Machico
El segundo de nuestros 7 dias en Madeira lo dedicamos al extremo noreste de la isla. Allí se ubica la localidad de Caniçal, desde donde parte uno de los circuitos de senderismo más icónicos que hacer en Madeira: la Punta de San Lorenzo.
La Punta de San Lorenzo es una península que aloja una reserva natural que resguarda plantas y aves endémicas. El paisaje es sorprendente, seco y muy árido en ciertas zonas, a la vez que surcado por formaciones de piedra volcánica. El contraste con el característico verde de la isla es total.
El circuito de senderismo recibe el nombre de la «cola del dragón«, por la forma que adquiere la península vista desde el cielo. Su nombre oficial es «PR 8 – Vereda da Ponta de São Lourenço» (todos los circuitos de senderismo en Madeira están denominados con las letras PR). Es un camino de aproximadamente 6 kilómtros entre ida y vuelta, de dificultad moderada por lo empinado de algunos tramos. Nos demoró unas 3 horas hacerlo, incluyendo una parada de café a la mitad (prioridades que tengo en mi vida).
Mi recomendación para hacer el camino de la cola del dragón es llegar temprano (idealmente antes de las 10:00). Por ser uno de los circuitos más famosos para hacer en Madeira, se llena de gente. Caminarás un buen rato en un terreno exigente, así que no querrás tener que agregar uno o dos kilómetros al recorrido por haber tenido que aparcar lejos del punto de inicio.
Al terminar el circuito regresamos a Caniçal para visitar el Museo de la Ballena de Madeira. El mismo expone la historia y relación de la isla con estos animales. En cierta forma glorifica la antigua labor de los balleneros, personajes muy queridos de la historia madeirense que contribuyeron a la caza de ballenas y la industria detrás de la obtención de aceites y otros productos derivados. Pero por otro lado educa acerca de los tipos de ballenas que habitan las aguas de Madeira y concientiza acerca de la protección de estas especies. Desde 1986 está prohibida la caza de ballenas en las aguas que rodean el archipiélago, hasta 200 millas.
La otra localidad importante al noreste de la isla es Machico, donde se encuentra una de las pocas playas de arena en Madeira. Vale la pena también adentrarse un poco en las montañas cercanas para llegar al Miradouro da Portela, con una de las mejores vistas de esta zona de la isla.
3. Levada das 25 Fontes & Ponta do Sol
El circuito PR 6 – Levada das 25 Fontes, conduce a 25 cascadas en medio de las montañas al oeste de Madeira. Lleva unas 3 horas hacer el camino de aproximadamente 8,5km ida y vuelta desde la carretera ER110. Es también uno de los mejores circuitos de senderismo en Madeira, por lo que la recomendación de iniciar por la mañana aplica 😉
El camino es en bajada para la ida. Ergo, el retorno es más intenso. Es una buena opción parar en la casa de té a mitad de camino entre las cascadas y el estacionamiento que marca el inicio del camino junto a la carretera. Los pasteles de nata ahí son imperdibles. Pero el mejor tip que puedo darles es, desde ese punto, emprender un camino de 1,5km extra hasta la cascada Risco (ruta PR 6.1 Levada do Risco). Es un camino de baja dificultad envuelto en bosque y tranquilidad. Menos frecuentado que la ruta principal a las 25 cascadas, Levada do Risco es un sendero imperdible.
Ambos circuitos te habrán llevado más o menos la mitad del día. Al regresar al coche condujimos unos kilómetros hacia el Este, pasando por los campos eólicos de Madeira y llegando al Miradouro da Bica da Cana. Este es uno de los puntos más altos por donde pasa una carretera madeirense. La vista permite aprecias el Valle de las Monjas y el Pico Ruivo, la montaña más alta de Madeira (y la tercera de Portugal). Siguiendo por la misma carretera ER110 pasarán por los miradores Molinas y Lombo do Mouro, con vistas al sur.
Para regresar al sur de la isla desde los puntos anteriores hay varias opciones de rutas escénicas. Son caminos serpenteantes que nacen en las peladas cumbres, cruzan los densos bosques en las laderas, y culminan en las ciudades. Nosotros nos tomamos nuestro tiempo para descender por la ER209 hacia la localidad de Ponta do Sol. Este es, fácilmente, uno de los pueblos más lindos de Madeira (y, en mi opinión, el más lindo).
Ponta do Sol tiene un coqueto centro con pintorescos cafés y restaurantes. Uno de los mejores platos de pulpo que probé en Portugal lo encontré aquí, en el restaurante Caprice. El centro está compactado junto a una pequeña bahía rodeada de montañas. La torre de la iglesia, la costanera adornada con flores, y las fachadas coloridas frente al mar hacen que uno se sienta dentro de una pintura. La playa es de roca, como la mayoría en Madeira. Sin embargo, un breve viaje en coche hacia la vecina localidad de Calheta te permitirá disfrutar de su playa de arena si eso es lo que buscas.
4. Funchal
La capital de la Región Autónoma de Madeira es el plan perfecto para hacer a la mitad de este recorrido por Madeira en 7 dias. Mi mayor consejo es no visitarla un domingo, ya que la mayoría de mercados, tiendas, y hasta algunos museos cierran.
Estos son los lugares que visitar en Funchal en un día:
- Avenida Arriaga: una de las calles principales de Funchal que te permitirá ver algunos de los lugares más importantes de la ciudad. Estos incluyen el Jardín Municipal, la Catedral de Funchal, el Teatro Municipal, el famoso Hotel Ritz, y el Palacio de São Lourenço.
- Avenida do Mar: este bulevar bordea el puerto y sirve de paseo costero a la ciudad. La zona entre esta avenida y la Arriaga está repleta de restaurantes, cafeterías y tiendas.
- Mercado dos Lavradores: el tradicional mercado agrícola de Funchal es hoy uno de los principales mercados donde comprar exquisiteces portuguesas, flores y plantas típicas, recuerdos, frutas, verdura, pescado fresco, o simplemente sentarse a disfrutar de un trago en su terraza.
- Rua de Santa Maria: la calle más famosa de Funchal destaca por sus fachadas tradicionales decoradas con colorido arte. No faltan restaurantes ni bares. Por la noche se llena de comensales y artistas callejeros.
- Ciudad Vieja: el casco antiguo de Funchal es la zona alrededor de la Rua de Santa Maria. Hoy está en un equilibrio entre fachadas descuidadas reminiscentes de otro tiempo y edificios restaurados con elegantes tiendas u hoteles. Se destaca el Fuerte de São Tiago.
- Teleférico de Funchal-Monte: el teleférico conecta el puerto de Funchal con la localidad de Monte, en la ladera de la montaña. Es un viaje de aproximadamente 10 minutos que permite apreciar Funchal y la expansión urbana de Madeira desde las alturas.
- Monte: la localidad de Monte es un imprescindible que ver en Funchal. Al salir del teleférico estarás a metros del Jardim Monte Palace Madeira, un jardín botánico tropical de elegante arquitectura, esculturas y arte al aire libre, con llamativas plantas exóticas, e infinidad de aves. También vale la pena detenerse en la Iglesia de Monte, de tradicional estilo portugués.
- Carros de cesto do Monte: aunque hoy existe el teleférico, la forma tradicional de viajar de Monte a Funchal era por carros de mimbre montados en patines, conducidos por dos hombres vestidos de blanco (llamados Carreiros) que lo deslizaban por las empinadas calles. Hoy la tradición se mantiene para los turistas. El punto de partida está a pasos de la iglesia de Monte.
Otras opciones incluyen el Museo CR7 que honra a Cristiano Ronaldo, el Jardín Botánico, la Fortaleza de São João Baptista do Pico, la Playa Formosa y el Balneario Lido. Estos últimos si buscases dónde nadar en Funchal. Un viaje en auto de pocos minutos hasta la vecina localidad de Câmara de Lobos es otro buen plan si quisieses visitar el Cabo Girão Skywalk, un mirador con pasarela de vidrio y vistas a Funchal y la costa sur de Madeira.
5. Pico do Arieiro & Pico Ruivo
¿Preparados para el más intenso de estos 7 días en Madeira? Partimos temprano por la mañana en dirección al Pico do Arieiro. Esta es la tercera cima más alta de Madeira, y se la puede alcanzar el auto por carretera. Un estacionamiento limitado (razón por la cual conviene madrugar) marca el inicio del camino PR 1: Vereda do Arieiro, que conduce hacia la cima del Pico Ruivo. Esta aventura de aproximadamente 14 kilómetros es el circuito más famoso de Madeira y está en la lista de deseos de cualquier aficionado del senderismo. Es también la ruta más difícil de Madeira.
El camino conduce desde el Pico do Arieiro (1818 msnm) sobre crestas estrechas, escaleras amenazadoramente empinadas hacia arriba y hacia abajo, caminos serpenteantes, así como a través de túneles oscuros. La caminata es una prueba de resistencia alimentada por adrenalina, que a menudo conduce a romper y quemar piernas – especialmente cuando se sube al Pico Ruivo (1862 msnm).
Algunos consejos para hacer la ruta al Pico Ruivo:
- Lleva suficiente agua para todo el día. La ruta demora entre 4 y 5 horas entre ida y vuelta, y solo hay una pequeña proveeduría con altos precios en el Pico Ruivo.
- Lleva calzado cómodo e impermeable. La zona de los túneles suele tener agua acumulada en el suelo.
- Procura iniciar temprano. La ruta es muy concurrida y los contingentes de turistas llegan a partir de las 10:00. Nosotros iniciamos cerca de las 9:00 sin demasiada gente.
- Se puede hacer la ruta de noche para llegar al Pico Ruivo al amanecer. Calcula algo de tiempo extra en este caso.
- El camino empieza en la cima del Pico do Arieiro y continúa el primer kilómetro al sol, pero luego transcurre entre túneles y por la cara más fría de las montañas, donde no da el sol por la mañana. En altura hará frío y habrá viento; procura llevar ropa adecuada.
Aunque la diferencia de altura entre el inicio y el final es de 44 metros, el total del recorrido con sus subidas y bajadas implica escalar unos mil metros. La ruta pondrá a prueba tu resistencia y disparará la adrenalina, pero la satisfacción está garantizada durante y al final del recorrido.
Los primeros kilómetros transcurren en bajada, lo que no hace del regreso cosa fácil. El camino se estabiliza a la mitad, cruzando los túneles y serpenteando entre montañas. Luego empieza una serie de subidas y bajadas, algunas muy empinadas y con escaleras de metal y cadenas para asistirte. Estas reciben el cariñoso nombre de «escaleras de la muerte». ¡Pero no dejes que esto te desanime! 😁 Los distintos puntos panorámicos al costado del camino son alucinantes, y la vista al final desde el punto más alto de Madeira te dejará sin palabras.
6. Avistamiento de ballenas
El día siguiente al sendero más exigente de Madeira hay que tomárselo con calma. Aprovechamos el excelente clima para tomar un tour de avistamiento de ballenas desde Funchal. Hay varias compañías que prestan este tipo de excursiones, y todas pueden encontrarse en sus oficinas en el puerto de Funchal o consultarlas a continuación. En temporada existe también la posibilidad de nadar con delfines.
Un gran punto a favor de Madeira como destino para avistar ballenas es que hay especies autóctonas que viven en las aguas de la isla todo el año. Claro que también hay otras especies migratorias que frecuentan la isla entre los meses de abril y julio: por ejemplo el rorcual común y la ballena azul.
Los cachalotes y los calderones piloto de aleta corta son los más comúnmente avistados. En nuestro caso tuvimos suerte y también vimos delfines comunes. Otras especies que podrías avistar incluyen tortugas marinas y lobos marinos. Las vecinas Islas Desiertas también albergan una colonia de focas monje.
7. Circuito Norte (São Vicente – Faial)
En el último de estos 7 días en Madeira regresamos a la cara norte de la isla para recorrer las rutas entre las localidades de São Vicente, São Jorge, Santana, y Faial. La ruta que las conecta es un camino escénico con decenas de miradores y puntos panorámicos, pero también hay senderos y otros sitios de interés que visitar.
Comenzando por São Vicente, esta localidad es célebre por su icónica capilla en la cima de un cerro, la Capelinha de Nossa Senhora de Fátima. Más interesante aún son las Grutas de São Vicente, formadas hace milenios por ríos de lava y que hoy sirven de museo vulcanológico (lamentablemente se encontraban cerradas al momento de mi visita, así que no tengo más información que compartir).
El camino hacia el Este por la ER101 conduce al Miradouro de São Cristovão, una de las postales más coloridas e impresionantes de la costa norte de Madeira. Muy cerca de ahí se encuentra la localidad de São Jorge, famosa por las ruinas de los antiguos molinos de caña de azúcar que se instalaron aquí al principio del proceso de asentamiento de la isla.
Nosotros aprovechamos nuestro paso por esta zona de la isla para emprender una ruta de senderismo de baja dificultad: la PR18 Levada do Rei. Este camino es mayormente plano, con cornisas junto a los pequeños canales que transportan el agua de las cascadas y manantiales hasta las ciudades. Al final del mismo se encuentra la cascada del mismo nombre, sumida en un entorno verde y fresco donde las aves son protagonistas. Este sendero lleva unas 3 horas para recorrer aproximadamente 10 kilómetros entre ida y vuelta.
Por la tarde continuamos rumbo al Este pasando por la localidad de Santana. El atractivo aquí son las tradicionales casas madeirenses con sus empinados techos de paja. En mi opinión no es nada especial, pero vale la pena una breve parada en el camino.
Finalmente, en Faial, el Miradouro do Guindaste brinda una de las postales más lindas de la costa virgen del norte de Madeira. A tan solo metros del mirador existe una playa de roca y zona de balneario que se puede disfrutar todo el año.
El retorno a la zona de Funchal se hace por la ER103, que atraviesa las montañas de norte a sur. En el camino se puede hacer una breve parada en el Miradouro Ribeiro Frio para apreciar el interior de la isla. Alternativamente y si el tiempo lo permite, la ruta PR11 Levada dos Balcões se presta como alternativa de baja dificultad para explorar el interior de la isla hasta llegar al Miradouro dos Balcões. Esto último nos quedó pendiente por falta de tiempo.
Senderismo en Madeira
En esta tabla resumo los aspectos más relevantes de cada uno de los circuitos de senderismo en Madeira que mencioné antes.
| Circuito | Distancia (ida y vuelta) | Duración | Altura máx. / mín. | Dificultad |
|---|---|---|---|---|
| PR 8 – Vereda da Ponta de São Lourenço | 6 km | 2:30 – 3:00 hs | 123 m / 26 m | Media |
| PR 6 – Levada das 25 Fontes | 8,5 km | 3:00 – 3:30 hs | 1288 m / 964 m | Media |
| PR 6.1 – Levada do Risco | 3 km | 1:30 hs | 1288 m / 1000 m | Baja |
| PR 1 – Vereda do Arieiro (a Pico Ruivo) | 14 km | 4:00 – 5:00 hs | 1867 m / 1490 m | Alta |
| PR 18 – Levada do Rei | 10,3 km | 3:00 hs | 710 m / 530 m | Baja |
| PR 11 – Vereda dos Balcões | 3 km | 1:30 hs | 880 m / 870 m | Baja |
Para conocer acerca de los otros senderos en Madeira, te recomiendo visitar madeiraoceantrails.com. Tienen un mapa interactivo para fácilmente navegar por todas las opciones, con información de distancias, puntos de partida, y dificultad.
¿Qué tan caro es viajar a Madeira?
Terminemos esta guía de viaje a Madeira en 7 dias con la pregunta del millón: ¿es cara Madeira? La respuesta dependerá de la billetera de cada quien, pero puedo decirte que los precios en la isla son menores que en el continente. En parte, por los subsidios a la gasolina, energía y transporte. Lo único más caro fue el costo de los alimentos en los supermercados. Estos son algunos precios de referencia al momento de nuestro viaje el último invierno.
| Litro de gasolina 95 | EUR 1,76 |
| Alquiler de auto (tipo Renault Captur) | EUR 49/día (incl. seguro contra todo riesgo) |
| Cena para 2 personas en restaurante (Funchal) | EUR 38-50 |
| Excursión de avistamiento de ballenas | EUR 30 p/p |
| Menú en cafetería (Café + pastel de nata) | EUR 4-5 |
| Entrada a museo de la ballena | EUR 10 p/p |
| Teleférico Funchal-Monte | EUR 18 p/p (i/v) |
| Docena de huevos | EUR 2,80 |
| 500gr de pan fresco | EUR 1,50 |
| Litro de leche | EUR 0,95 |
| Plato de pulpo con papas en restaurante | EUR 19-22 |
Espero que esta información te haya resultado útil para planear tu viaje a Madeira en 7 días (o más, ¿por qué no?) 😎
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Excelente la información para viajar a Madeira!! Como siempre muy completo. Te sigo desde España y hace tiempo. Pronto iré a Madeira!!!
Muchas gracias. Me alegro de que te haya servido la información 🙂 ¡Buen viaje!