Qué ver en Berlin: Consejos e itinerario completo

Si planeas visitar Berlín pronto, llegaste al lugar indicado. Después de tres años viviendo en la ciudad (y queriéndola cada día un poco más), te traigo este itinerario completo para disfrutar de Berlín sin perderte de nada. Ten en cuenta que este artículo mostrará recorridos para conocer Berlín en 4 días (lo mínimo para conocer todo lo mejor que ver en Berlin) pero la capital alemana merece más tiempo. Añadiré días adicionales a este itinerario para visitar Berlín a partir del quinto día. Encontrarás mapas ilustrando este itinerario para recorrer Berlín y tablas al final del artículo indicando cómo conviene combinar los distintos distritos de Berlín para aprovechar al máximo el tiempo.

No te pierdas mi Guía y Consejos para visitar Berlín, con información complementaria sobre dónde alojarse, transporte público en Berlín, precios, consejos de seguridad, eventos anuales y más.

Que ver en Berlin: itinerario completo

Primero que nada debemos aclarar que 4 días no alcanzan para cubrir todo lo que hay para hacer y que ver en Berlin. Sin embargo, considero que es la cantidad mínima de días necesarios para darse una justa impresión de lo diversa y polifacética que es la ciudad más grande de Alemania. La Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría le dieron forma a la ciudad como la conocemos hoy, y la convirtieron en un ejemplar urbano único en el mundo.

Este itinerario está pensado para maximizar la cantidad de lugares que ver en Berlin por sectores. Al final del post encontrarás un mapa marcando cada uno de los lugares mencionados en el itinerario. De esta forma, podrás reajustar mis sugerencias a tus intereses o cantidad de días en Berlín 😊 Ten en cuenta que casi todo puede hacerse a pie, asumiendo que visitas Berlín entre abril y octubre cuando los días son más largos y permiten disfrutar mejor de la ciudad. Por último, cada día asume que inicias tu recorrido por la mañana (ergo, no contempla tiempo de recuperación si el motivo de tu viaje a Berlín fuese ir de fiesta 😉).

Día 1: Mitte

Mitte es el distrito central de la capital y el que concentra la mayoría de lugares imprescindibles que ver en Berlin. Independientemente de si te alojases en este distrito o no, es fácilmente alcanzable desde cualquier punto de la ciudad. Su conectividad lo hace el lugar perfecto para iniciar tu recorrido por Berlín por la mañana. En este distrito encontrarás las mayoría de lugares imprescindibles que visitar en Berlín.

Puerta de Brandenburgo y Pariser Platz

Inicia tu recorrido por Berlín en su lugar más representativo: Pariser Platz. La «plaza de París» está coronada por la Puerta de Brandenburgo. El monumento neoclásico del siglo XVIII fue construido por orden del rey Federico Guillermo II de Prusia. Por décadas fue la monumental puerta de ingreso a la ciudad en el camino que la comunicaba con la vecina Brandenburgo. Su conexión con la avenida Unter den Linden (antiguamente un bulevar bordeado por tilos) permitía una conexión directa con el antiguo palacio real (hoy el Humboldt Forum, del que hablaré más adelante).

La Puerta de Brandenburgo ha sido el epicentro de momentos históricos para Alemania desde su construcción. El robo de su cuadriga tras la invasión napoleónica, el ingreso del ejército nazi en sus desfiles a Berlín y, más recientemente, su bloqueo por el Muro de Berlín son algunos de los principales sucesos que vio ocurrir la puerta. Desde el fin de la Guerra Fría, la Puerta se convirtió en un símbolo de la unificación alemana ya que, nuevamente, la gente podía circular a través de ella.

La historia de la Puerta de Brandenburgo es una de tragedias, divisiones, y pequeños momentos de gloria. Un claro paralelo con la historia de Alemania en general. Los alrededores de Pariser Platz ofrecen algunos de los edificios más elegantes que ver en Berlin: el Hotel Adlon, la embajada de Rusia, la Academia de Artes y, a pasos, el distrito gubernamental (Regierungsviertel) donde se destaca el edificio del Reichstag.

Que hacer en Berlin en pocos dias

Monumento a las Víctimas del Holocausto

Quizá uno de los monumentos más simples pero emocionantes que ver en Berlin sea el Monumento a las Víctimas del Holocausto. Ubicado a pasos de Pariser Platz, se trata de un conjunto de 2711 bloques de hormigón de distintos tamaños y alturas en un terreno irregular. Conforme uno ingresa al lugar, el terreno comienza a descender al mismo tiempo que nos bloques a tu alrededor se hacen más altos. El camino se angosta y cada vez es más oscuro. Hay muchas interpretaciones para esto, siendo la más común que se trate de una representación del sentido de «no escapatoria», sentirse atrapado, y desorientado. De alguna manera, esto busca recrear algunas de esas sensaciones que abordaron a las víctimas del Holocausto.

El monumento se puede visitar gratis, pero hay un centro de interpretación debajo de él para el cual se debe comprar entrada.

cosas que ver en Berlin en un dia
Monumento a las víctimas del holocausto

Potsdamer Platz

Siguiendo camino al sur unos pocos minutos habrás llegado a Potsdamer Platz (la plaza de Potsdam). Previo a la Segunda Guerra Mundial, esta era una de las plazas con mayor actividad comercial de Berlín, y un punto neurálgico de la ciudad. Tras la devastación de la guerra y haber quedado, posteriormente, partida en dos por el infame muro, Potsdamer Platz ya no es lo que era.

Numerosos esfuerzos del gobierno de Berlín por revitalizar la zona y hacerla más atractiva para residentes y visitantes por igual devinieron en los centros comerciales a su alrededor: The Playce (que incluye un mercado gastronómico, «Manifesto») y el antiguo Sony Center (moderno complejo de tiendas, cafés y cine actualmente en remodelación). El mirador Panorama Punkt, en el 25° piso de uno de los rascacielos de Potsdamer Platz ofrece vistas de 360° de la ciudad (por un precio). La plaza exhibe también restos del muro que la atravesó durante décadas y el primer semáforo de Europa.

A pasos de Potsdamer Platz se encuentra el Mall of Berlin, el principal centro comercial de la ciudad. Museos atractivos en los alrededores son el Deutschland Museum y el Museo Alemán del Espionaje. El primero ofrece un recorrido por la historia de Alemania desde la época de las invasiones romanas hasta la reunificación. El segundo se centra en espionaje y las historias de la Guerra Fría. Ambos son interactivos y buenas opciones para visitar Berlin con niños.

Topographie des Terrors & Museo Judío de Berlín

Dirigiéndote al sudeste por la calle Stresemannstraße pasarás junto a Topographie des Terrors (Topografía del terror). Se trata de un centro de documentación a cielo abierto que expone cómo funcionaba el aparato estatal durante el nazismo. Es un recorrido abierto y gratuito que demora entre 20 y 30 minutos. Esta especie de museo se encuentra en la manzana que solían ocupar instituciones como la la Oficina Central de Seguridad del Reich (RSHA), la Gestapo y la Schutzstaffel (SS) durante el período nazi. 

Un poco más adelante, las ruinas de la estación de trenes Anhalter Bahnhof permanecen en pie en medio de un parque. Hoy la estación, que alguna vez fue de las estaciones terminales de Berlín, se encuentra bajo tierra ya que después de la guerra no fue reconstruida como era. Recomiendo seguir camino hacia el Museo Judío de Berlín paseando por los alrededores de Theodor-Wolkk-Park, donde disfrutarás de algunos de los murales de arte callejero más lindos de Berlín.

Visitar el Museo Judío de Berlín puede ser un desvío de la ruta convencional que ver en Mitte pero, en mi opinión, vale la pena. El museo se recorre en aproximadamente una hora. Es un museo simple pero bien logrado, con un buen uso del espacio para transmitir sensaciones y dejar una marca en el visitante.

Checkpoint Charlie

Durante la Guerra Fría, el cruce entre Berlín Oriental y Berlín Occidental era posible solo a través de puestos fronterizos. Estos «checkpoints» de control desaparecieron tras la caída del muro de Berlín, pero parte del puesto C aún se preserva como monumento.

Checkpoint Charlie es uno de los puntos más turísticos que ver en Berlín y puede parecer simple a primera vista. No es más que una caseta en medio de la calle, coronado por un McDonald’s justo en el punto donde empezaba Occidente (en mi opinión, un hecho casi poético). Para tomar dimensión de lo que esta esquina de Berlín era hace menos de 40 años hay que detenerse a ver las imágenes y leer los textos sobre las paredes de la calle Friedrichstraße.

Checkpoint Charlie Berlin
Checkpoint Charlie

Gendarmenmarkt y las catedrales gemelas

El camino al norte por la Friedrichstraße conducirá a la estación de metro Stadtmitte, a pasos de la cual encontrarás Gendarmenmarkt. En mi opinión, se trata de la plaza urbana más elegante de Berlín. En Navidad es escenario de uno de los mejores mercados navideños de Berlín. El resto del año, se presenta como uno de los sitios donde siempre encontrarás alguna actividad cultural. La razón para esto es la presencia de la Casa de Conciertos de Berlín (la Konzerthaus), ubicada en el medio de la plaza y flanqueada por dos catedrales gemelas: el Deutscher Dom (la catedral alemana) y el Französischer Dom (la catedral francesa).

Gendarmenmarkt fue durante siglos una plaza de mercado, y una de las principales de Berlín por la presencia de las catedrales. Un dato curioso es que las cúpulas de las catedrales fueron añadidas para dar simetría a la plaza, pero originalmente no formaban parte de los planos de las catedrales. La inspiración para esto vino de la Piazza del Poppolo en Roma. Gendarmenmarkt es uno de los pocos sitios de Berlín que fue reconstruido a semejanza de lo que era una vez concluída la guerra.

En los alrededores de la plaza encontrarás algunos de los sitios más elegantes de Berlín: hoteles de categoría, restaurantes de fama internacional, y la chocolatería Rausch con su pequeño museo del chocolate. Recomiendo una visita a esta última, especialmente si te tocara mal clima en Berlín (que, siendo sinceros, es bastante probable).

Gendarmenmarkt, Berlin
Gendarmenmarkt, Berlin

Unter den Linden

Siguiendo este itinerario, deberÍas estar de vuelta en Unter den Linden por la tarde. Esta avenida fue, desde siempre, la principal arteria de la ciudad que conectaba la Puerta de Brandenburgo con el Palacio Real. En el camino hacia el río Spree encontrarás algunos de los edificios más lindos de Berlín, la mayoría recostruidos tras la guerra: la Biblioteca Nacional (recomiendo entrar a ver el patio), el edificio central de la Universidad Humboldt, la Staatsoper (Ópera Estatal, una de las 3 óperas que existen en Berlín), la Catedral de Sankt-Hedwig con su llamativa cúpula, y el Palais Populaire (un pabellón de artes).

Los dos puntos más interesantes, en mi opinión, no son ninguno de estos monumentales edificios. Primero, en la plaza Bebelplatz, se destaca el Monumento a la quema de libros del nazismo. En el mismo lugar donde, en 1933, el régimen nazi realizó la quema de libros de autores no alineados con su ideología, existe un hoy un simple monumento. Se trata de una pieza de vidrio en el suelo que deja ver una biblioteca vacía bajo tus pies. Esto se aprecia mejor de noche.

El segundo sitio es la Neue Wache. Este pequeño edificio neoclásico fue originalmente cuartel de las tropas del príncipe de Prusia. Fue posteriormente un monumento a las víctimas del fascismo y actualmente es un monumento recordatorio a las «víctimas de guerra y dictadura». Bajo el óculo del edificio se halla la estatua Madre con hijo muerto de Käthe Kollwitz. Expuesta al sol, lluvia y nieve, simboliza el sufrimiento de los berlineses durante la Segunda Guerra Mundial y es uno de los monumentos más interesantes que ver en Berlin.

Mejores sitios que ver en Berlin: Neue Wache
Madre con hijo muerto

Museumsinsel: la isla de los museos

La Isla de los Museos es uno de los lugares más impresionantes de Berlín. Uno puede pasarse todo el día aquí, fácilmente. Su nombre lo dice todo: esta porción de tierra en medio del río Spree alberga museos de renombre internacional:

  • Altes Museum: es el museo más viejo de la isla, que expone antigüedades prusianas.
  • Neues Museum: exhibe colecciones egipcias y prehistóricas, entre ellas el famoso busto de Nefertiti.
  • Alte Nationalgalerie: alberga colecciones de arte del siglo XIX.
  • Bode Museum: exhibe colecciones de escultura y arte de la tardo-antigüedad y período bizantino.
  • Pergamonmuseum: el museo del Pérgamo es el más impresionante de todos. En su interior alberga edificios a tamaño original, reconstruidos, como el altar de Pérgamo, la Puerta de Babilonia y la puerta del mercado de Mileto, formados por partes tomadas de las excavaciones originarias – Actualmente se encuentra en restauración hasta, al menos, 2030.

Pasear entre los museos de la isla es un imprescindible de cada visita a Berlín. Aunque decidas no visitar ninguno, los edificios son atracciones por sí mismas. Desde el Lustgarten, el parque central de la isla, se puede ver el Altes Museum, la Catedral de Berlín, y el Humboldt Forum (reconstrucción del Palacio Real prusiano, perdido durante la guerra).

Berliner Don
Berliner Dom desde el Lustgarten

El Berliner Dom, la catedral de Berlín, merece una visita. Si bien hay que pagar EUR 10 para ingresar, vale totalmente la pena. Aunque pareciera más viejo, el edificio fue terminado en 1905. Es el templo luterano más grande de Berlín y su impresionante cúpula alcanza los 98 metros de altura. Su interior es magnífico, con nada que envidiarle a las iglesias más grandes de Roma, además de albergar la cripta donde se hallan los sarcófagos de diversos miembros de la familia Hohenzollern (cuyos miembros fueron príncipes, electores, reyes y emperadores de Hohenzollern, Brandeburgo, Prusia, el Imperio Alemán y Rumania). Pero lo más impresionante es subir a la cúpula para admirar Berlín desde las alturas. En mi opinión, el mejor mirador de Berlín.

Finalmente, el Humboldt Forum es uno de los lugares más interesantes que ver en la Isla de los Museos. Su fachada es una recreación a tamaño real de aquella del Palacio Real. El edificio original fue destruido durante la guerra y posteriormente desmantelado durante el período comunista. Tras la reunificación, el gobierno de Berlín decidió reconstruirlo con un interior moderno. El sitio alberga museos como el Museo Etnográfico o el Museo de la Ciudad Berlín, además de exposiciones itinerantes. En sus patios internos suelen realizarse actividades culturales de todo tipo. También tiene una terraza, a la que se puede acceder por unos EUR 3 para ver Berlín desde unos 30 metros de altura.

Los fines de semana encontrarás un mercado de artesanos, pintores y diseñadores junto a la isla, sobre la calle Am Kupfergraben. Otro imperdible que ver es la estación de metro «Museumsinsel», definitivamente una de las más lindas de la ciudad.

Mejores miradores de Berlin
La cúpula del Berliner Dom es uno de los mejores miradores de Berlín

Nikolaiviertel

Cruzando el puente Rathausbrücke llegarás al Nikolaiviertel, el distrito histórico de Berlín. Fue en ese lugar donde la ciudad fue fundada, cerca del año 1200. Su ubicación se debe a su posición intermedia entre rutas comerciales a la actual Polonia. Nikolaiviertel es, a la vez, el distrito más viejo y el más nuevo de Berlín. Sus callecitas empedradas flanqueadas por fachadas medievales fueron reconstruidas en la década del 1990 a semejanza de los originales. Hoy pueden encontrarse aquí restaurantes de cocina alemana tradicional, tiendas de recuerdos, pequeñas cafeterías, e interesantes esculturas.

Su proximidad con Alexanderplatz y Unter den Linden hacen que regresar a tu hotel desde Nikolaiviertel sea muy fácil. Un punto perfecto para terminar tu primer día de este itinerario para visitar Berlin.

Centro historico de Berlin
Nikolaiviertel

Free walking tours en Berlín

Todos los sitios que mencioné dentro del primer día de este itinerario suelen ser visitados por la mayoría de free walking tours de Berlín. Pariser Platz suele ser uno de los puntos de partida de los mismos. Ten en cuenta que, con la historia y tamaño de la ciudad, las opciones de free walking tours en Berlín son muchas. A continuación puedes ver cuál es el que mejor se ajusta a tus intereses 😉

Día 2: Muro de Berlín, búnkeres, y contrastes

El segundo día de este itinerario para visitar Berlín es uno de contrastes. En Berlín hay una historia oscura en cada esquina, casi siempre relacionada a algo ocurrido en el siglo pasado. Una ciudad marcada por la Segunda Guerra Mundial y la posterior Guerra Fría como ninguna otra en el mundo, pero que resurgió de ambos horrores para convertirse en la capital más verde, inclusiva, y diversa de Europa. Este itinerario es la mejor manera de explorar esos contrastes.

El Muro de Berlín

Comienza el segundo día visitando el Gedenkstätte Bernauer Straße, el sitio memorial donde un fragmento del Muro de Berlín se preserva en su estado original. Este es el único punto de la ciudad donde podrás ver cómo era el muro durante los años ’80, con la «franja de la muerte» y torres de vigilancia incluídas.

Para entenderlo mejor, recomiendo visitar el Centro de Documentación del Muro de Berlín (Dokumentationszentrum Berliner Mauer) justo enfrente. La entrada es gratuita y el recorrido lleva menos de una hora. Videos e imágenes con textos en alemán e inglés muestran cómo y por qué se construyó el muro, cómo intentaban escapar miles de ciudadanos de Berlín Oriental, cómo cambió Berlín durante la división, y qué causas llevaron a la caída del muro el 9 de noviembre de 1989.

Lo más interesande de este museo es su terraza, desde donde se puede apreciar el muro, con el espacio de aproxidamente 37 metros entre ambos muros donde los oficiales de Berlín Oriental tenían permitido disparar a muerte a cualquiera que intentara cruzar. Uno no toma dimensión de lo colosal que fue el muro hasta que lo ve desde lo alto.

Porción del muro preservada como era originalmente, desde la plataforma de observación.

Búnkeres de la Segunda Guerra Mundial

Desde la estación de metro de Bernauer Straße, toma la línea U8 en dirección a Wittenau por dos estaciones, hasta Gesundbrunnen. Una vez ahí, sigue las indicationes para llegar a Berliner Unterwelten.

Berliner Uniterwelten es una asociación que busca preservar el legado histórico de algunos de los búnkeres que existían en Berlín. Ofrecen distintos recorridos por los túneles del metro de Berlín: recomiendo hacer el tour de la Segunda Guerra Mundial, donde te contarán cómo fueron improvisados y cómo funcionaban estos búnkeres entre las paredes del metro. Otro tour disponible invita a adentrarse en los túneles que muchos ciudadanos de Berlín Oriental intentaron usar para escapar al Oeste, sin éxito. Un tercer tour lleva a los vistiantes a la torre de defensa antiaérea ubicada en el parque Humboldthein, al otro lado de la calle.

Las visitas duran aproximadamente hora y media y pueden hacerse en español. Es necesario reservar con anticipación pero a partir de un mes antes de la fecha deseada. Pueden consultar todos los tours, fechas y precios a través de su página web. En mi opinión, este tour es la mejor manera de conocer los búnkeres de Berlín (personalmente, no recomiendo Berlin Story Bunker, donde el recorrido es únicamente con audioguías y lleva mucho más tiempo, sin llegar a ver mucho del búnker en sí).

Un dato interesante es que en Gesundbrunnen también se puede visitar la exposición sobre Germania, de acuerdo a los planes de Hitler para convertir a Berlín en «Welthauptstadt Germania» (capital del mundo). El sitio expone una maqueta y planos que representan la visión de los nazis para el futuro de Berlín, de haber ganado la guerra. Casi ninguno de estos planes fue llevado a cabo, pero como residente es super interesante reconocer ciertos patrones y detalles que aún pueden verse por ahí.

Bunkeres de Berlin
Búnkeres del subterráneo de Berlín | Fuente: Berliner Unterwelten e.V. & Wikimedia Commons

Mauerpark & Prenzlauer Berg

Para apalear el bajón emocional que se siente después de haberse sumergido en las partes más oscuras de Berlín durante la Guerra Fría y la Segunda Guerra Mundial, nada mejor que un poco de verde. Desde Berliner Unterwelten se puede caminar hasta Mauerpark, uno de los parques más queridos por los berlineses, y uno de los parques con más carácter de la ciudad.

Mauerpark es famoso por su mercado de pulgas, que se puede visitar todos los domingos. Es también célebre su pequeño anfiteatro al aire libre, donde las tardes de verano encontrarás a locales y visitantes disfrutando de sesiones abiertas de karaoke. Sin embargo, es probable que durante la semana no veas mucho más que un simple parque (y, siendo sincero, este no entra ni en el top 10 de parques más lindos que ver en Berlin). Cruzándolo de norte a sur habrás llegado al barrio de Prenzlauer Berg.

Prenzlauer Berg es un barrio relativamente joven para estándares berlineses. Se construyó a finales del siglo XIX, en consecuencia a la instalación de fábricas de cerveza al norte de Berlín. Durante la Segunda Guerra Mundial no sufrió tanta devastación como otros distritos berlineses, pero al quedar al Este de la Cortina de Hierro fue víctima del descuido por parte de Alemania Oriental al punto que, al caer el muro, Prenzlauer Berg era un distrito venido abajo, algo peligroso, y con enorme cantidad de viviendas abandonadas.

Su destino cambió radicalmente tras la reunificación y en la última década se ha convertido en uno de los barrios más gentrificados, elegantes, y «cool» de Berlín. En las calles en torno a la Kastanienallee, y las plazas Kollwitzplatz, Wasserturmplatz y Helmholtzplatz se concentra la oferta gastronómica del barrio. La vida nocturna se da alrededor de la estación de la línea U2 del metro, Eberswalder Straße. Pero Prenzlauer Berg no es un distrito de fiesta, mas todo lo contrario: sus calles empedradas, fachadas coloridas, veredas calmas y sileciosos parques lo convierten en uno de los barrio predilectos por familias jóvenes de altos ingresos.

En Prenzlauer Berg hay un circuito de arte callejero que atrae a visitantes de todo el mundo en busca de los murales más famosos de Berlín. Dado que los murales cambian y son reemplazados constantemente, no puedo decirte con claridad dónde encontrarlos. Pero, cuando estés por Prenzlauer Berg, no dejes de mirar en cada callejón porque podrías sorprenderte con alguna magnífica obra de arte callejero.

Si tuvieses tiempo, recomiendo extender el paseo por Prenzlauer Berg hasta el parque Volkspark Friedrischshain. En mi opinión, uno de los parques más lindos del lado Este de Berlín, especialmente por la «Fuente de los cuentos de hadas», donde figuras típicas de estas historias adornan la escena.

que ver en Berlin Prenzlauer Berg
Prenzlauer Berg

Hackescher Markt y alrededores

Seguramente hayas disfrutado de un buen almuerzo y posterior café en Prenzlauer Berg. Por la tarde es el mejor momento para regresar a Mitte. La zona inmediatamente al noroeste de Alexanderplatz, alrededor de la calle Münzstraße, concentra tiendas de todo tipo y constituye el lado más céntrico de lo que era Berlín Oriental. Es un tumulto de bicicletas, peatones, tranvías y unos pocos autos que hace que Berlín se sienta como una metrópolis por un momento.

El punto de interés es Hackescher Markt, una plaza pública frente a la estación de tren del mismo nombre. Ubicada en la intersección de las calles Oranienburgerstraße y Rosenthalerstraße, es uno de los mejores sitios donde hacer compras en Berlín. Encontrarás a algunas de las mejores marcas de tecnología y ropa en los alrededores.

Sin embargo, el atractivo principal los los patios de Hackescher (Hackescher Höfe). Se trata de un conjunto de ocho patios internos, típicos de las edificaciones residenciales de Berlín, con tiendas de diseño, cafés, cines, teatros, pizzerías, y galerías de arte independientes. Cada patio tiene un estilo distinto; algunos más verdes, otros más modernos, otros elegantes. Definitivamente es uno de los mejores sitios que visitar en Mitte.

Un contraste con los impolutos patios de Hackescher es el callejón vecino al que se accede por Rosenthalerstraße 39. Si bien muy turístico, este pasaje es una de las mejores representaciones de cómo solía verse Berlín Oriental: ventanas tapadas, fachadas cubiertas en grafiti y un notable aire de decadencia. Hoy funcionan ahí un cine, el Centro Ana Frank, una cervecería, el Monsterkabinett (una galería de arte dedicada a «monstruos mecánicos», a falta de una mejor manera de describirla), y el Museo Otto Weidt (gratuito, cuenta la historia de Otto Weidt, quien dio empleo a personas ciegas y con otras discapacidades durante la Segunda Guerra Mundial para evitar que fueran deportados).

Al dejar Hackescher Markt, vale la pena caminar unos minutos por la Oranienburgerstraße para ver el edificio de la Sinagoga de Berlín. Habrás visto su cúpula dorada desde alguno de los miradores nombrados en este itinerario para visitar Berlín, pero el edificio en sí es también muy bonito. En determinadas fechas se puede visitar por dentro, con audioguía en español por unos EUR 3,00. Pueden ver más información en su sitio web.

Hackescher Höfe Berlin
Hackescher Höfe

Cúpula del Reichstag al atardecer

Para terminar tu segundo día en Berlín, no se me ocurre algo mejor que visitar la cúpula del Reichstag al atardecer. Desde Hackescher Markt u Oranienburgerstraße, basta con encontrar el río Spree y bordearlo en dirección Oeste. En el trayecto pasarás por el paseo rivereño junto al parque Monbijoupark y un par de puentes que ofrecen algunas de las mejores vistas de Berlín: el Ebertsbrücke y el Weidendammer Brücke. Si tuvieras tiempo, recomiendo parar en el Tränenpalast, un museo gratuito frente a estación de trenes Friedrichstraße que, durante la Guerra Fría, funcionó como aduana entre las dos Alemanias (hoy expone cómo era cruzar la frontera en aquellos tiempos y relata historias de familias separadas por el muro).

La calle Reichstagsufer bordea al río Spree hasta llegar al edificio del Reichstag. Este quizá sea el edifico más importante de la historia política alemana. El lugar fue la sede del parlamento en tiempos del II Imperio Alemán (1871-1918) y más tarde del parlamento de la República de Weimar (1919-1933). Quedó inhabilitado en 1933 al llegar los nazis al poder, destruido por la guerra, y en desuso durante la Guerra Fría cuando la capital de Alemania Occidental fue trasladada a Bonn (el edificio había quedado justo junto al muro, del lado Oeste, tras la división). Su esplendor le fue devuelto tras la reunificación y, desde 1999 es el lugar de reunión del parlamento alemán (Bundestag). Si bien se pueden contratar visitas guiadas gratuitas al edifico, lo que más vale la pena es visitar su cúpula de vidrio de 24 metros de altura desde donde se puede ver la Puerta de Brandenburgo y los edificios más icónicos del Este, y el río Spree, el parque Tiergarten, la Columna de la Victoria y las torres más modernas del Oeste.

La visita a la cúpula del Reichstag es gratuita pero debe reservarse con anticipación. Cuanto antes mejor. Deben hacerlo a través de esta página. Por tratarse del edificio más importante del gobierno alemán, es necesario registrarse previamente y pasar controles de seguridad antes de la visita. Recomiendo llegar con algo de tiempo extra antes del horario de tu visita 😉

El Reichstag se encuentra frente a la Plaza de la República, donde destaca la «Bandera de la Unidad». Esta es la bandera alemana más grande que flamea en el país y que fue izada el 3 de octubre de 1990, cuando se formalizó la reunificación alemana. En los alrededores encontrarás varios edificios del gobierno, todos muy modernos. Este distrito recibe el nombre de «Regierungsviertel» (literalmente: el distrito del gobierno) y conforma uno de los puntos más interesantes que ver en Berlín en cuanto a arquitectura.

Vale la pena caminar unos pocos minutos hasta la estación central de Berlín (Hauptbahnhof) y tomar foros desde los puentes Moltkebrücke y Gustav-Heinemann-Brücke por la noche. También es posible acceder a la terraza del museo Futurium para disfrutar de vistas panorámicas del Regierungsviertel, gratis. Pero si prefirises dejar esta parte para el itinerario del día 4, lo mejor que puedes hacer a la salida de tu visita al Reichstag es regresar a la Puerta de Brandenburgo. ¡Es todo un espectáculo verla iluminada de noche!

Dia 3: Friedrichshain & Kreuzberg

El tercer día de este itinerario incluye dos de los distritos imperdibles que aparecerán en cualquier lista de lugares que ver en Berlin. Friedrichshain y Kreuzberg quedaron separados por el Muro de Berlín por casi 30 años. Son barrios vecinos con un parecido cultural significativo pero, al mismo tiempo, con historias muy distintas. El primero todavía presenta la cara más soviética de Berlín, mientras que el segundo es el resultado de la ocupación de viviendas por parte de artistas, allá por los años ’70 y ’80 cuando nadie quería vivir en este pedazo de Berlín Occidental enteramente rodeado por el Este. Pero primero, comienza el día dirigiéndote a Alexanderplatz, quizá el punto más icónico de Berlín después de la Puerta de Brandenburgo.

Alexanderplatz

Alexanderplatz es el punto neurálgico del Este. Confluyen avenidas, líneas de metro, líneas de tren, tranvías, y decenas de miles de personas cada día. En mi opinión, es el lugar más feo de la ciudad. No obstante, es uno de los imprescindibles que ver en Berlin. Históricamente fue una plaza de comercio y tuvo su auge en la década de 1920 cuando, junto a Potsdamer Platz, se convirtió en el centro comercial, cultural, y de vida nocturna berlinesa. La plaza fue destruida durante la Batalla de Berlín en 1945 y, desde entonces, fue rediseñana múltiples veces.

Tras la Segunda Guerra Mundial, Alexanderplatz quedó del lado Oriental. Las renovaciones encaradas por Alemania Oriental le dieron un marcado carácter socialista. Poco ha cambiado desde aquella última gran renovación en los años ’60, pudiendo notarse a simple vista ese estilo «comunista moderno» que marcó a muchas de las ciudades europeas al Este de la Cortina de Hierro. Edificios enormes, cuadrados, grises, con un toque de brutalismo son la figura repetida.

Pero más allá de la estética, Alexanderplatz es un sitio icónico de Berlín. La estrella del lugar es la torre de televisión (el Berliner Fernsehturm) Se destacan el Park Inn Hotel (el edificio más alto de Berlín, sin contar a la torre de televisión), el Reloj Mundial (estructura de metal que rota y muestra la hora de todo el mundo), y el centro comercial Alexa a pocos metros. Al lado sur de las vías del tren que ingresan a la estación elevada del mismo nombre, Alexanderplatz alberga a la Fuente de Neptuno, la Iglesia de Santa María, y está coronada por el Ayuntamiento Rojo de Berlín (Rotes Rathaus). El lugar también suele ser el escenario de distintos festivales, ferias de comida, y mercados navideños.

Visitar la Torre de Televisión de Berlín cuesta a partir de EUR 25 por persona, dependiendo del ticket que elijas. Si bien las vistas desde la torre más alta de Alemania son increíbles, pienso que es un alto precio a pagar sólo por subir. Una mejor alternativa me parece el mirador del rooftop bar de la torre Park Inn, también a gran altura y con el añadido de poder ver, además, la torre de televisión. El costo de este mirador ronda los EUR 6.

Karl-Marx-Allee

Desde Alexanderplatz, emprende camino hacia el Este por la avenida Karl-Marx-Allee y adéntrate en el barrio de Friedrichshain. Originalmente llamada Stalinallee en honor al dictador soviético, este camino te hará sentir como si hubieses viajado en el tiempo a la Alemania Oriental de los años ’60. La avenida se extiende por casi 2 kilómtros, y tiene unos 90 metros de ancho. Está flanqueada por edificios de aldededor de ocho pisos, con inconfundible impronta soviética inspirada en los bulevares moscovitas. El propósito de la llamada Stalinallee era ofrecer una entrada gloriosa al centro de Berlín Oriental desde el Este. En los edificios a ambos lados del bulevar se encontraban tiendas, restaurantes, cafés y lujosos apartamentos.

Recorrer la Karl-Marx-Allee en scooter o bicicleta es un gran plan para verla en toda su extensión (desde Alexanderplatz hasta Frankfurter Tor). Si esto no fuese una opción, recomiendo hacer el camino a pie entre Alexanderplatz y Strausberger Platz para ver dos de los edificios más famosos del bulevar: el Café Moscú y el Kino International. El primero fue informalmente renombrado a «Café Kiev» tras la invasión de Rusia a Ucrania en 2022. El segundo aún es un cine funcional. Desde la estación de metro de Strausberger Platz podrás tomar la línea U5 en dirección a Honow por dos estaciones, y bajar en Frankfurter Tor. Ahí te llamarán la atención las dos torres gemelas, una a cada lado del bulevar, que en el centro enmarcan a la torre de televisión. Por lejos, una de las mejores postales de Berlín para los aficionados de la fotografía.

El bulevear fue el escenario de marchas de soldados, tanques y otros vehículos militares durante el régimen comunista. También fue el escenario de la sangrienta protesta del 17 de junio de 1953, cuando una huelga de trabajadores que protestaban contra el régimen fue reprimida por las tropas soviéticas dejando, al menos, 125 muertos. Verás múltiples monumentos y referencias a esta fecha en distintos puntos de Berlín.

Edificios en Frankfurter Tor
Edificios en Frankfurter Tor

Friedrichschain

Desde su creación a principios del siglo XX, Friedrichshain ha sido considerado un distrito de clase obrera. Fue así tanto antes como después de la Segunda Guerra Mundial y hasta la caída del muro de Berlín. Durante la Segunda Guerra Mundial Friedrichshain fue uno de los lugares más dañados de la ciudad, como consecuencia de los bombardeos y el combate casa por casa. Terminada la guerra, la frontera entre el sector bajo administración soviética y el sector bajo administración estadounidense lo separó del vecino Kreuzberg, quedando Friedrichshain en el lado Oriental.

Tras la caída del muro, Friedrichshain empezó a ganarse una reputación de distrito joven y de fiesta, en parte debido a lo baja que era la renta en el lado Oriental una vez ocurrida la reunificación. El barrio alberga a muchos de los clubes tecno más famosos de Berlín, incluido el mítico Berghain. La zona alrededor de la plaza Boxhagener Platz está repleta de restaurantes y cafés. La calle Simon-Dach-Straße concentra muchos bares y pubs. Las tiendas tienen un marcado estilo de artista independiente, y no encontrarás marcas de renombre ni grandes cadenas de mercados en esta zona.

En contraste con Mitte y Prenzlauer Berg, Friedrichshain aún mantiene algo de ese ambiente «decadente» que caracterizaba al Este, pero con la justa cuota de modernización que lo hace atractivo. Es uno de los distritos donde vivir en Berlín más buscados por los jóvenes, ya que en su lado sur se encuentran las oficinas de importantes empresas multinacionales como MTV, Universal Music, y Amazon. El barrio está frecuentemente en el centro de la polémica por el rápido proceso de gentrificación que viene atravesando desde hace apenas una década, que resulta en un incremento de los alquileres y, según las voces en contra, en la paulatina «pérdida de autenticidad».

Además de recorrer sus calles y disfrutar de su estilo despreocupado, vale la pena acercarse hasta le costa del río para ver la famosa escultura del Molecule Men. Posada sobre el río Spree, la enorme escultura de 30 metros de alto representa a tres hombres fusionándose entre sí. Se ubica en el punto donde confluyen los distritos de Friedrichshain, Kreuzberg y Treptow, y representa así la unión de Berlín. Una forma de acceder al río desde Friedrichshain es cruzando las vías del tren que separan las partes norte y sur del barrio por el Modersohnbrücke. Este puente es uno de los puntos favoritos de los locales para disfrutar de una cerveza al atardecer, y donde podrás ver una de las caras más relajadas y auténticas de la vida en Berlín.

Otro sitio destacable del barrio es el RAW-Gelände. Se trata de un antiguo predio industrial, reconvertido para uso deportivo, cultural, y gastronómico. En él encontrarás cervecerías, espacios para practicar deportes, algunos clubes nocturnos, bares, mercados de pulgas (domingos), y hasta un mercado navideño de temática medieval si visitaras Berlín en diciembre. Es también uno de los lugares de Berlín donde encontrar una de las famosas cabinas de teledisko, la discoteca más pequeña del mundo ubicada en una antigua cabina telefónica.

El sur de Friedrichshain es la cara más moderna del barrio. Se destacan el East Side Mall, la Mercedes Benz Platz (recientemente renombrada a Uber Platz) y la torre de Amazon. Pero también presume de tener dos de las postales más famosas de la ciudad: el Oberbaumbrücke y la East Side Gallery. ¡No te puedes ir de Berlín sin haberlos visto!

Oberbaumbrücke
Oberbaumbrücke

El Puente de Oberbaum (Oberbaumbrücke) es otro de los símbolos de la reunificación alemana ya que conectaba a Berlín Oriental con Berlín Occidental (los distritos de Friedrichshain y Kreuzberg, respectivamente). El puente destaca por las dos torres ubicadas en el medio del cruce, de estilo gótico báltico. Las mismas representaban la puerta de la ciudad por el río Spree, ya que el puente se ubicaba donde terminaba la frontera urbana de Berlín en el siglo XIX y funcionaba una especie de aduana para el control de mercaderías. Su nombre en alemán deriva de los troncos de árbol unidos por piezas de metal que se utilizaban para bloquear el paso por el río por las noches, evitando así el contrabando.

A metros del puente encontrarás la East Side Gallery. Por lejos, uno de los lugares imprescindibles que ver en Berlin. Hoy se trata de la porción más famosa del muro de Berlín, que corría a lo largo de la rivera del Spree. Básicamente, se trata de una galería de murales a cielo abierto que se extiende por unos 1300 metros. Consta de más de 100 murales pintados por artistas de todo el mundo que rinden homenaje a la libertad, la paz, y la unión. Algunos de los murales son considerados monumentos, como el Bruderkuss («beso entre hermanos») que representa al líder de la Unión Soviética, Leonid Brézhnev, y al líder de la Alemania Oriental, Erich Honecker, besándose. Otros murales cambian constantemente. La East Side Gallery es la galería de arte al aire libre gratuita de mayor longitud y duración del mundo.

En caso de recorrer la galería en toda su extensión, te recomiendo continuar unos 700 metros hasta Holzmarkt25. Este es uno de los sitios de Berlín que no suelen aparecer en los recorridos turísticos tradicionales, pero uno de mis favoritos. Se trata de otro espacio donde encontrarás eventos, cervecerías, pastelería, bar de vinos y tiendas de artistas independientes. Todo junto al río Spree. Su nombre se traduce a «mercado de madera», por lo que no te sorprenderá encontrar que todo (las edificaciones, mesas, balcones, etc) esté hecho de este material. La razón es que este pequeño espacio de Berlín junto al río Spree surge como forma de protesta a la creciente urbanización moderna y exclusiva que sucedía en el Este tras la reunificación. Su propósito era demostrar que una ciudad también puede alocar espacios a la arquitectura sustentable y bajo un esquema de negocios sostenible (pueden traducir el artículo en Wikipedia sobre Holzmarkt para más detalles).

East Side Gallery Berlin
East Side Gallery

Norte de Kreuzberg

Al cruzar el río Spree hacia el sur te encontrarás en el barrio de Kreuzberg. El norte de este distrito está marcado por las estaciones del metro Schlesisches Tor, Görlitzer Bahnhof, y Kottbusser Tor. Alrededor de estas se extienden calles rodeadas de bares, restaurantes, algunos clubes, y tiendas donde el factor común son las culturas de Medio Oriente. El barrio aloja a una de las mezquitas más importantes de Berlín, la Mezquita de Omar. Kreuzberg, como su vecino Neukölln, es uno de los barrios de Berlín con mayor porcentaje de inmigrantes, en su mayoría turcos.

Gastronómicamente, el norte de Kreuzberg ofrece una incontable variedad de sitios donde probar comidas de todo el mundo. Las calles Köpenicker Straße, Adalbertstraße y Oranienstraße no decepcionan en cuando a diversidad y buen precio. La última es también una de las mejores calles de Berlín para tomar un trago y, de paso, disfrutar del más diverso arte callejero. Kreuzberg es también uno de los mejores sitios donde disfrutar de la vida nocturna en Berlín. Los bares con terraza y balcones sobre el río en la isla Lohmühleninsel son una excelente opción para regresar por la noche.

Kreuzberg en su lado norte tiene un aspecto venido abajo, sucio, desordenado. El caos le da carácter. El barrio siempre fue el favorito de inmigrantes, estudiantes, artistas y trabajadores de bajo poder adquisitivo que buscaban un sitio económico en Berlín Occidental. Durante la división, Kreuzberg estaba casi enteramente rodeado por el muro de Berlín, por lo que era uno de los sitios menos frecuentados y peor conectados de la ciudad. Eso cambió al caer el muro, cuando Kreuzberg se encontró nuevamente en el centro de Berlín.

El legado de los artistas e inmigrantes persiste, y Kreuzberg sigue siendo uno de los barrios más diversos de Berlín, aunque ya no el más económico. En lo cultural, Kreuzberg fue tomando forma por la influencia del movimiento punk rock de los ’70s (su club SO36 sigue siendo uno de los clásicos sitios para disfrutar música en vivo en Berlín), de las culturas afroamericanas, de medio oriente y, más recientemente, latinoamericanas. Es el epicentro del arte callejero en Berlín, que es un espejo de la diversidad del barrio. Al final del itinerario encontrarás el mapa donde he marcado todos los sitios que ver en Berlin, incluyendo una de las rutas de arte callejero en Kreuzberg.

Otros lugares notables que visitar en el norte de Kreuzberg son el parque Engelbecken (que tiene uno de los cafés más lindos de Berlín) y el Markthalle Neun. Este último es un mercado gastronómico que ofrece variedad de comidas, tragos y postres de todo el mundo. El punto más curioso del barrio quizá sea la casa del árbol que se encontraba en «tierra de nadie» durante la época de la división. Fue construida por un inmigrante turno en la década de 1980 en un espacio verde técnicamente administrado por Berlín Oriental, que había quedado detrás del muro, en el lado Occidental. La historia es súper curiosa y pueden leerla en este artículo.

Bares en Berlin Kreuzberg
Lohmühleninsel

Landwehrkanal & Sur de Kreuzberg

El Landwehrkanal es un canal que divide al bario de Kreuzberg en norte y sur. Es un espacio bordeado de parques, bicisendas, circuitos peatonales, ocasionalmente adornado por algún café o cervecería. Los protagonistas son los berlineses que disfrutan del sol junto al agua cada vez que se puede, quienes practican kayakismo o disfrutan de una cerveza en algún bote inflable y, por supuesto, los patos y cisnes.

Mi lugar favorito de Kreuzberg es el puente Admiralbrücke. Es un tranquilo lugar en medio de la zona residencial más linda de Kreuzberg, donde los locales suelen disfrutar de una cerveza, pizza, y relajada música en vivo por las tardes. Personalmente me parece uno de los lugares más auténticos de Berlín, y de los que mejor demuestran lo relajada que puede ser la vida en la capital alemana.

El sur de Kreuzberg contrasta con el norte por ser más relajado, más silencioso, y más prolijo. Pero no por eso faltan las cosas que hacer. La calle Graefestraße concentra variedad de restaurantes, la mayoría asiáticos, cafeterías y panaderías. Los alrededores de la Iglesia de Südstern también se prestan como un lugar relajado donde disfrutar de un café sin tener que esperar por una mesa (como suele ser normal en muchos sitios de Berlín). Cecarno a la iglesia, escondido a simple vista, encontrarás el Fichtebunker, un gasómetro del siglo XIX convertido a búnker contra ataques aéreos durante la Segunda Guerra Mundial.

El sur de Kreuzberg limita con el barrio de Neukölln. La avenida Kottbusser Damm los separa, en una zona coloquialmente denominada Kreuzkölln. Por las tardes, las inmediaciones de la plaza Reuterplatz, el puente Hobrechtbrücke, y la calle Maybachufer son buenas opciones donde disfrutar de un trago. Los fines de semana encontrarás un mercado de pulgas en Maybachufer, la calle paralela al canal.

Dia 4: West Berlin

El cuarto día de este itinerario lo dedicaremos exclusivamente a Berlín Occidental. Dependiendo de cuántos días dispongas, querrás hacer más o menos cosas en esta parte de Berlín. Más adelante en este artículo comparto una tabla mostrando cómo combinar las distintas cosas que ver en Berlin Occidental para que el itinerario no sea tan intenso 😉

Aeropuerto de Tempelhof

El aeropuerto de Tempelhof fue la razón por la cual Berlín Occidental sobrevivió a los bloqueos impuestos por el Este durante la Guerra Fría. Este puente aéreo establecido entre Berlín Occidental y la República Federal Alemana permitió importar los productos necesarios para suplir las necesidades básicas de la población. El aeorpuerto funcionó como tal hasta el año 2008.

En la antigua terminal funciona hoy un museo que relata el rol del aeropuerto en la supervivencia de Berlín Occidental. El resto del predio, en su mayoría, es un parque público (Tempelhofer Feld). Las dos pistas de aterrizaje y todo a su alrededor son espacios de ocio donde los berlineses andan en bicicleta, patinan, remontan barriletes, hacen barbacoas, ejercitan y demás. Todo en un parque único en el mundo.

vivir en Berlin
Mates en el Tempelhofer Feld

Viktoriapark & Park am Gleisdreieck

A pocos minutos del aeropuerto de Tempelhof se encuentra Bergmannkiez, un sub-distrito del barrio de Kreuzberg. Es uno de los rincones más relajados del barrio, con pequeños cafés y variedad de restaurantes. Su principal atractivo, sin embargo, es Viktoriapark.

El parque se ubica sobre una colina y se destaca por su cascada artificial. En la cima se ubica un monumento que conmemora las victorias bélicas prusianas, y se puede apreciar parte de Kreuzberg y Mitte desde las alturas. Los locales se refieren a esta zona como «el Montmartre de Berlín» aunque, si me preguntan a mí, creo que es un desesperado intento de marketing para atraer más turistas 😅 No obstante, Viktoriapark es uno de los parques más lindos que visitar en Berlín. Por supuesto que no falta un Biergarten donde parar a recargar energías.

A pocos minutos a pie de Viktoriapark se encuentre el Park am Gleisdreieck. Aunque este parque no sea uno de los puntos turísticos que ver en Berlín, sí lo es el Museo Tecnológico Alemán ubicado en su extremo norte. Este museo es colosal y lleva horas recorrerlo completo. Sin embargo, no quería dejar de mencionarlo. Es un excelente museo para visitar tanto para adultos como para niños, y un gran plan que hacer en Berlin con mal tiempo.

Si eligieras no visitar el Museo Tecnológico, aún así te recomiendo dar un paseo por el parque de camino al barrio de Schöneberg. Park am Gleisdreieck significa algo así como «parque en el triángulo de vías» y es exactamente eso: un predio verde ubicado entre las vías del tren. Es uno de los parques más modernos de Berlín, con jardines comunitarios, una cervecería local, cafeterías, y toda clase de juegos para niños.

Viktoriapark Berlin
Viktoriapark

Schöneberg

A menos de 15 minutos caminando desde Park am Gleisdreieck habrás llegado a Winterfeldplatz. La plaza se conectca con Nollendorfplatz por medio de la calle Maaßenstraße en sus alrededores se encuentra el centro del barrio de Schöneberg. Es un distrito residencial, con tiendas, interesantes museos, lugares donde comer, y pequeñas pero elegantes plazas. Los fines de semana encontrarás un mercado gastronómico en Winterfeldplatz.

El área alrededor de Nollendorfplatz ha sido el epicentro de la vida nocturna para la comunidad LGBTQ+ en Berlín desde los años ’20s. Schöneberg fue el distrito que posicionó a Berlín como un faro progresista hace más de un siglo, atrayendo a personas dentro del espectro queer desde toda Europa. Fue en esta zona donde se realizaron las primeras manifestaciones en reclamo de igualdad de derechos para la comunidad homosexual, décadas antes de que sucedieran los disturbios de Stonewall en Nueva York. También fue al norte del barrio donde se realizó la primera cirugía de cambio de sexo, en 1930. Los bares de Schöneberg se prestaban como un lugar seguro para homosexuales, transexuales, bisexuales y los intelectuales que estudiaban el sexo y el género. Se realizaban eventos donde exploraba la sexualidad más allá de lo legalmente permitido, se imprimían y publicaban revistas y panfletos informativos para la población no heterosexual, y se celebraba la diversidad como un ninguna otra parte del mundo en aquel entonces. La actriz Marlene Dietrich era una figura frecuente en los bailes de drag queens que tenían lugar en Schöneberg.

Schöneberg y Berlín perdieron su luz como faro del progreso en la lucha por la igualdad de derechos durante el régimen nazi. Pero el Oeste fue recuperando este camino, poco a poco, durante los años de la Guerra Fría. Artistas y músicos colaboraron con la recuperación de las raíces del barrio durante esta época. Algunos nombres, como el de David Bowie, son frecuentemente relacionados con Schöneberg por haber sido su hogar y lugar de trabajo. Hoy, los alrededores de la calle Motzstraße concentran bares y pubs LGBTQ+ y celebran, en julio de cada año, el festival Motzstraßenfest que celebra la cultura LGBTQ+.

Puntos que visitar en Schöneberg incluyen, además de los mencionados, el Schwules Museum (pequeño museo con exposiciones estacionales vinculadas a la historia LGBTQ+ en Berlín), Urban Nation (excelente plan que hacer en Berlin para los amantes del arte callejero), y Viktoria Luise Platz. Esta última es una de las plazas más elegantes de Berlín, rodeada de antiguos edificios que albergan restaurantes, tiendas de moda y de fotografía.

Que ver en Berlin Schöneberg

Tauentzienstraße & Kurfürstendamm

En el extremo noroeste de Schöneberg se encuentra Wittenbergplatz. Esta plaza da comienzo a lo que fue el centro de Berlín Occidental y a las calles de compras más exclusivas e importantes de Berlín: Tauentzienstraße & Kurfürstendamm.

El primer punto imperdible que ver en Berlin es el centro comercial KaDeWe. Su nombre es una abreviación de Kaufhaus des Westens («casa de compras del oeste»). Es la tienda departamental más grande de Europa continental en caundo a superficie, y desde su creación en 1907 ha rivalizado con Harrod’s y Galerías Lafayette. Aquí encontrarás a las marcas de moda, diseño y joyería más exclusivas del mundo, pero también el departamento de delicatessen más grande de Europa. Por supuesto que este merece una visita.

La Tauentzienstraße es una avenida comercial de 500 metros de largo situada entre los distritos de Charlottenburg y Schöneberg. Fue diseñada a semejanza de los bulevares parisinos durante el Segundo Imperio Alemán. Sin embargo, tras la guerra, casi nada queda de aquel elegante pasado. A ambos lados de la misma encontrarás famosas marcas de chocolates, ropa, electrónica, perfumes, y el centro comercial Europa Center. A 500 metros de Wittembergplatz, la avenida se convierte en Kurfürstendamm y continúa por unos 2 kilómetros siempre bordeada por tiendas de renombre.

Kaiser-Wilhelm-Gedächtniskirche

La Kaiser-Wilhelm-Gedächtniskirche (“iglesia en recuerdo del emperador Guillermo”), se halla en la plaza Breitscheidplatz, justo donde la Tauentzienstraße y Kurfürstendamm se encuentran. La iglesia se terminó en 1895, siguiendo el estilo romántico tardío de la región del río Rin. El edificio original poseía cinco torres, siendo la principal la más alta de la ciudad, y coronaba el final del elegante bulevar. El templo fue destruido casi por completo durante la Segunda Guerra Mundial, pero su ruina fue conservada como monumento. Hoy es uno de los puntos más interesantes que ver en Berlín, y alberga un pequeño museo gratuito en su interior. En él podrás ver imágenes de cómo eran la iglesia y sus alrededores antes de la destrucción de 1945.

La iglesia no fue reconstruida, pero se añadieron dos modernas torres a ambos lados de la misma. Son de concreto y obstruyen la vista de la ruina desde las avenidas. Esto ocurre deliberadamente para simbolizar la distorsión de la guerra. La torre más alta funciona como campanario, mientras que la más baja y ancha aloja a la nueva iglesia evangélica. Vale la pena entrar al templo durante el día, cuando la luz penetra a través de miles de cristales azules.

Tiergarten & Río Spree

Al norte de la plaza Breitscheidplatz encontrarás múltiples referencias al Zoológico de Berlín. La estación de trenes más importante del Oeste es Zoologischer Garten, el cine más importante del Oeste es el Zoo Palast, esculturas y mosaicos de animales decoran paredes en la estación de metro y en la superficie. El Jardín Zoológico de Berlín es uno de los más viejos del mundo y es el más visitado de Europa. Se ubica en el extremo sudoeste del parque central de Berlín: el Tiergarten. Desde la terraza del centro comercial Bikini Berlin o desde el mirador del rooftop bar Monkey Bar pueden apreciar la dimensión del zoológico y del parque (además de obtener las mejores postales de Berlín Occidental).

El Tiergarten es uno de los parques imperdibles que visitar en Berlín. Originalmente concebido como zona de caza para el deleite de la aristocracia prusiana y porteriormente convertido a parque urbano, es uno de los rincones verdes preferidos de los berlineses. El parque se divide en cuatro cuadrantes debido a las avenidas que lo cruzan:

  • Sudoeste: encontrarás el zoológico, el lago Neuer See, y el Café am Neuen See, uno de los mejores Biergarten de Berlín.
  • Noroeste: alberga algunas de las «unidades habitacionales» construidas por el urbanista Le Corbusier en la década de 1950 y el Englischer Garten de Berlín, que también contiene un lindo Biergarten y casa de té, y el Palacio de Bellevue (residencia del Presidente de Alemania).
  • Sudeste: se destaca la isla Luiseninseln y el Rosedal, además de elegantes monumentos a la realeza prusiana, compositores alemanes, y figuras militares. El lado sur del cuadrante está enmarcado por la zona de embajadas y los modernos edificios de Potsdamer Platz.
  • Noreste: se destaca el monumento al ejército soviético que liberó a Berlín en 1945, la Haus der Kulturen der Welt («casa de las culturas del mundo», un centro para la presentación y discusión del arte contemporáneo, con un enfoque especial en las culturas y sociedades no europeas), los edificios gubernamentales del Regierungsviertel y la cara occidental de la Puerta de Brandenburgo.

En el centro de estos cuadrantes se ubica la Columna de la Victoria (Siegessäule). El monumento celebra la victoria de Prusia y del Imperio austríaco contra Dinamarca en la Guerra de los Ducados de 1864. Originalmente se ubicaba en la Plaza de la República, pero fue movida al centro del Tiergarten como parte de los esfuerzos del régimen nazi por remodelar Berlín. Mide 69 metros de alto (para mis compatriotas, un metro más que el Obelisco de Buenos Aires) y se puede subir al mirador bajo el ángel dorado por unos EUR 4 por persona.

Berlín y el Tiergarten desde la Columna de la Victoria

Mi recomendación es, desde la Columna de la Victoria, caminar hacia el río Spree pasando frente al Palacio de Bellevue y virar a la derecha en el puente de Lutero (Lutherbrücke) para seguir camino por el Tiergarten bordeando el río. Esta ruta pasa por la Casa de las Culturas del Mundo, su lindo Biergarten, y termina en el Regierungsviertel. Desde aquí tendrán excelentes vistas de Berlín sobre el río Spree y de los modernos edifcios de gobierno alemán. Los mejores puentes para tomar la foto son el Moltkebrücke y Gustav-Heinemann-Brücke. En este punto estarán a pocos metros de la estación central, el inconfundible The Cube (un edificio en forma de cubo de 100m de lado), del Reichstag y de la Puerta de Brandenburgo para regresar desde cualquiera de ellos adonde sea que se estén alojando en Berlín 😎 ¡El itinerario perfecto para recorrer Berlín en 4 días!

Berlin Hauptbahnhof
Estación central de Berlín

Día extra: Charlottenburg & Grunewald

Disponer de un día extra en este itinerario te permitirá tomarte las cosas con más calma y conocer otros interesntes lugares que ver en Berlin. En este caso me enfocaré en otros de los lugares interesantes para visitar en Berlín (del lado Oeste). No obstante, más adelante en este post encontrarás una lista de otros lugares que ver en Berlín si tuvieras tiempo, y sus respectivas ubicaciones en el mapa 😊

Wilmersdorf-Charlottenburg

El distrito de Wilmersforf-Charlottenburg es una zona residencial y comercial que se caracteriza por sus elegantes y tradicionales edifcios, pequeñas plazas bordeadas por cafés, excelentes opciones donde comer, y exclusivas tiendas.

Ya mencioné Kurfürstendamm, la famosa calle comercial de Berlín Occidental. En su curso entre Ludwigkirchplatz y Walter-Benjamin-Platz encontrarás interesantes tiendas de diseño, exlusivas marcas de ropa y joyería, y variedad de restaurantes de todo el mundo. Fasanenstraße y Savignyplatz se prestan como unas de las calles y plazas más elegantes de Charlottenburg, respectivamente. En sus cercanías encontrarás el Theater des Westens («teatro del oeste»), el teatro más importante de Berlín Occidental, que tiene un lindo patio delantero donde descansar, cerveza de por medio.

Kantstraße es otra de las arterias del Oeste. Junto a esta avenida destacan famosos cafés frecuentados por celebridades, como el Café Kanzlers o el París Bar. También se concentran en esta zona diversos restaurantes de comida asiática. Berlín carece de un «barrio chino» como otras ciudades, pero este es el lugar donde ir para disfrutar de auténtica cocina asiática.

El camino hacia el Oeste te llevará hasta la Wilmersdorfer Straße, la calle peatonal más grande de Berlín. En mi opinión nada especial, pero un paso obligado de camino al Palacio de Charlottenburg.

Palacio de Charlottenburg

Desde Wilmersdorfer Straße llegarás, en pocos minutos a pie, a Schloßstraße, un elegante bulevar flanqueado por tradicionales edificios que sobrevivieron a la guerra. El bulevar conduce al frente del Palacio de Charlottenburg (Schloss Charlottenburg).

Con su estilo barroco del siglo XVIII, este palacio destaca como uno de los lugares más lindos que ver en Berlin. El rey Federico I de Prusia había ordenado la construcción del palacio en un pueblo en las afueras de Berlín. El palacio sería para su esposa, Sophie-Charlotte, quien fallecería antes de que el edifcio fuese terminado. En su honor, el palacio y el pueblo en que estaba fueron renombrados «Charlottenburg».

Se puede visitar el Palacio de Charlottenburg en visitas guiadas en alemán e inglés. Los alrededores del palacio, un jardín de estilo francés, el Mausoleo, y el bosque circundante forman parte de un parque público que se puede visitar gratis todo el año. Es uno de los parques más lindos que visitar en Berlín.

Palacio de Charlottenburg, Berlin
Palacio de Charlottenburg

Grunewald & Río Havel

Desde el Palacio de Charlottenburg dirígete en transporte público hasta Grunewald, el parque más grande Berlín. Se ubica al sudoeste de la ciudad y limita con el río Havel.

Grunewald está cubierto por un denso bosque de coníferas. En sus 3000 hectáreas de superficie alberga colinas, lagos, edificios históricos, espacios de recreación, lagos y playas. Lo ideal es recorrerlo en bicicleta, pero también se pueden visitar todos estos puntos a pie. Los más interesantes son:

  • Drachenberg: la «colina del dragón» es un punto en altura en el sector norte de Grunewald desde donde se puede ver la ciudad de Berlín en todo su esplendor.
  • Teufelsberg: muy cerca de la anterior, la «montaña del diablo» es el segundo punto más alto de Berlín. Así como la primera, es el producto de años de relleno de escombros de la guerra y su posterior cobertura con tierra y vegetación (más de 10 millones de metros cúbicos de escombro de la guerra formaron esta montaña). En la década de 1950, el ejército estadounidense vio la montaña como un sitio perfecto para establecer una estación de escucha. La misma formaba parte de la red de espionaje mundial Echelon. El sitio quedó en desuso tras la reunificación alemana y hoy alberga murales y otras obras de arte urbano.
  • Teufelsee: el «lago del diablo» se encuentra al pie de la montaña y es uno de los lagos favoritos por los nudistas.
  • Grunewaldturm: la «torre de Grunewald», con sus 78 metros de altura, fue construida a finales del siglo XIX en conmemoración del 100° natalicio del rey Guillermo I de Prusia. Hoy es un mirador abierto al público y al pie de ella se encuentra uno de mis Biergarten favoritos de Berlín.
  • Badestelle Grunewaldturm: pequeña playa pública en el río Havel junto a la Grunewaldturm.
  • Havelhöhenweg: circuito de senderismo que recorre varios kilómetros de bosque con desniveles y vistas del río Havel.
  • Lagos: Grunewaldsee, Krumme Lanke, y Schlachtensee son tres de los lagos más grandes donde se puede nadar en Berlín. También son fácilmente accesibles en transporte público. Todos tienen playas públicas y gratuitas.

Más lugares que ver en Berlin

Algunos lugares que ver en Berlín que no entraron en el itinerario, pero que vale la pena visitar si tuvieses tiempo, son:

  • Treptower Park: uno de los parques más lindos que ver en Berlin. Se ubica al Este de Kreuzberg y Friedrichshain, en el barrio de Alt-Treptow. Contiene un rosedal, Biergarten, un bosque (Plaenterwald), espacios de recreación, y un pequeño mercado de comida junto al puerto. Lo más impresionante es el Monumento al Ejército Soviético que conmemora la victoria sobre nazismo y a los aproximadamente 80 mil soldados soviéticos caídos durante la batalla de Berlín.
  • Neukölln: el distrito sudeste de Berlín es famoso por sus bares y oferta gastronómica, principalmente marcada por la influencia de las culturas de medio oriente. El mercado de pulgas de Maybachufer se puede visitar los fines de semana y esta calle paralela al Landwehrkanal es ideal para pasear y disfrutar un café. Los alrededores de Reuterplatz concentran bares y restaurantes. El pequeño sub-distrito Schillerkiez es uno de los espacios más bohemios del barrio y se ubica justo junto al Tempelhofer Feld. Al sur del barrio, el parque Körnerpark es una de las joyas de Berlín que generalmente escapa a la vista de los turistas.
  • Hansaviertel y Moabit: Hansaviertel es el resultado de un experimento urbano del arquitecto Le Corbusier. Sus edificios son cuadrados, altos, y reflejan esa idea de cómo sería el futuro en las décadas de 1960-1970. Los aficionados de la arquitectura lo consideran uno de los luagres más interesantes que ver en Berlin. Por mi parte, lo que más vale la pena visitar son los paseos junto al río Spree entre Hansaviertel y Moabit. Encontrarás una de las zonas más lindas y tranquilas de Berlín, frecuentemente ignoarada por los turistas pese a estar a minutos del Tiergarten. La zona cercana a los puentes Gerickesteg y Moabiterbrücke es de las más lindas.
  • Spandau: es uno de los distritos periféricos de Berlín, pero uno de los más tradicionales. Su ciudad vieja se siente como estar lejos de la gran ciudad, sumergidos en un tradicional pueblito alemán. Se destaca su arquitectura, calles empedradas, elegantes panaderías, y la Ciudadela de Spandau (Zitadelle Spandau). Esta última es una de las estructuras militares europeas del Renacimiento mejor conservadas (siglo XVI). Hoy es un museo.
  • Köpenick: parecido a Spandau pero en el Este, Köpenick tiene un casco histórico tradicional muy lindo y es hogar del palacio homónimo.
  • Wannsee: es un distrito ubicado al sudoeste de Berlín. Alberga la parte sur del parque Grunewald y es uno de los ricones de Berlín favoritos para nadar y disfrutar de la naturaleza. Se destacan su balneario con playa de arena e instalaciones, la Casa de la Conferencia de Wannsee (lugar donde fueron discutidos los planes de deportación y asesinato de los judíos europeos en 1942, hoy convertido en centro educativo), y la Pfueninsel (la «isla de pavos reales» es una reserva natural donde estas aves son las protagonistas. Un gran plan para visitar Berlín con niños).
  • Otros parques y jardines que ver en Berlin: se destacan el Jardín Botánico de Berlín (enorme predio que también cuenta con los invernaderos de la Universidad Libre de Berlín), los Jardines del Mundo (Gaerten der Welt, un jardín temático con jardines inspirados en distintas culturas), Bürgerpark Pankow (elegante parque en el distrito de Pankow, cercano al Palacio de Schönhausen), y los bosques de Müggelsee y Tegeler See (ambos con playas y pequeñas localidades cercanas: Friedrichshagen y Tegel, respectivamente).
  • Oranienburg: la pequeña ciudad se ubica al norte de Berlín, a una hora en tren. Es un popular destino para visitar desde Berlín por su palacio, playa junto al lago, bosques, y el Campo de Concentración de Sachsenhausen.
Monumento soviético en Treptower Park
Monumento al Ejército Rojo en Treptower Park, uno de los sitios más interesantes que ver en Berlin

Mapa de sitios que ver en Berlin

Todos los lugares mencionados en este itinerario para visitar Berlin en 4 días o más se encuentran marcados en el mapa a continuación:

Itinerario para visitar Berlin en pocos días

Días en BerlínItinerario propuesto
2 días en BerlínDía 1: mismo itinerario.
Día 2: East Side Gallery, Alexanderplatz, Hackescher Markt, Museo del Muro, Cúpula del Reichstag
3 días en BerlínDías 1 y 2: mismo itinerario
Día 3: East Side Gallery, Alexanderplatz, Reichstagsufer, Columna de la Victoria, Tiergarten, Iglesia Memorial Kaiser Wilhelm
4 días en BerlínDías 1 a 3: mismo itinerario
Día 4: posible combinación de itinerario de días 4 y 5 (reemplazar Aeropuerto de Tempelhof y/o Museo Tecnológico por más tiempo en Tiergarten o Charlottenburg)
5 días en BerlínDías 1 a 3: mismo itinerario
Días 4 y 5: posible más tiempo en Tiergarten (incluyendo Hansaviertel y Moabit) reemplazando Aeropuerto de Tempelhof y/o Museo Tecnológico o reemplazar itinerario del día 5 por escapada a Potsdam
6 días en BerlínDías 1 a 3: mismo itinerario
Días 4 y 5: más tiempo en Tiergarten (incluyendo Hansaviertel y Moabit) reemplazando Aeropuerto de Tempelhof y/o Museo Tecnológico
Día 6: Aeropuerto de Tempelhof, Neukölln, Treptower Park (recomendación: hacerlo en bicicleta) ó escapada a Potsdam
7 días en BerlínMismo itinerario de 6 días en Berlín con escapada a Potsdam, lagos, Oranienburg o alguna otra escapada de un día desde Berlín.

Berlin Card

Si planeas visitar Berlín por al menos 3 días, puede que te resulte conveniente comprar la Berlin Welcome Card. Es la tarjeta turística de la ciudad, que te permite ahorrar bastante dinero en más de 190 museos y atracciones que ver en Berlin. La tarjeta te permite ahorrar entre 25% y 50% en atracciones, museos, algunas tiendas, ciertos eventos, e incluye billete de transporte público.

Hay tres tipos de tarjeta, cuyas diferencias resumo en la tabla a continuación:

Berlin Welcome Card ClásicaBerlin Welcome Card + Isla de los MuseosBerlin Welcome Card All Inclusive
Precio por adultoa partir de EUR 26a partir de EUR 54a partir de EUR 99
Duracióna partir de 48 horas hasta 6 díasa partir de 72 horasa partir de 48 horas hasta 6 días
Transporte públicoIncluye billete de transporte público en zona ABIncluye billete de transporte público en zona ABIncluye billete de transporte público en zona ABC
Entrada incluida a museos de Isla de los MuseosNo
Incluye bus hop on hop offNoNoSí, por un día
Entrada gratuita a atracciones seleccionadas (más allá de Isla de los Museos)NoNo

En mi opinión, comprar la Berlin Welcome Card vale la pena si planeasen visitar los museos de la Isla de los Museos y atracciones famosas pero costosas como la Torre de Televisión. Solo por poner un ejemplo, consideremos el siguiente caso:

  • Visitar los 5 muesos de la isla de los museos es posible por EUR 24 (usando el day ticket)
  • Subir a la torre de televisión cuesta unos EUR 25
  • Un paseo en barco por el Río Spree puede costar a partir de EUR 20.
  • Subir al mirador de la catedral de Berlin cuesta EUR 10.
  • En total habrás gastado al menos EUR 79. Con la Berlin WelcomeCard de EUR 54 habrás pagado entre un 25%-50% en las últimas tres atracciones, resultando en un total de EUR 74,50.

Mi consejo siempre es investigar bien qué opciones ofrecen las tarjetas turísticas y, si cuadran con tus planes e intereses, hacer las cuentas para evaluar si conviene comprarlas o no. En general se puede ahorrar bastante dinero, pero hay que programar bien las cosas que hacer en Berlin para que valga la pena 😀

¡No dejes de explorar más artículos en mi blog sobre decenas de destinos para descubrir en Alemania! Gracias por haber llegado hasta aquí 🙂 ¡Buen viaje y feliz estadía en Berlín!

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