Llegamos a San Miguel de Tucumán el domingo 11 de enero cerca de las 11:00. El micro desde San Fernando del Valle de Catamarca recorre aproximadamente 250km parando en varios pueblos, haciendo que la duración del viaje roce las 4 horas. El precio por persona fue el equivalente a unos USD 14. El camino a Tucumán desde Catamarca es llano y atraviesa la zona de monte, hasta que nos acercamos a la capital tucumana. Desde la autopista que entra a la ciudad se ven edificios y más edificios. Estamos entrando a la sexta ciudad más grande del país, y se nota.
PRIMERA IMPRESIÓN DE SAN MIGUEL DE TUCUMÁN
Mi primera impresión de San Miguel de Tucumán fue la de una gran ciudad, tranquila. Claro que, como era domingo, era esperable. No obstante, la zona de la terminal de buses estaba repleta de gente, al igual que la avenida a la que sale la terminal, que estaba copada por vendedores ambulantes en la vereda.
Pasaríamos la noche en el Hostel Tucumán, sobre la calle Buenos Aires y a siete cuadras de la Plaza Independencia. Una noche en habitación cuádruple costaba el equivalente a USD 13. El hostel resultó uno de los mejores de mi viaje al noroeste.
- En este enlace pueden consultar todos los hostels y hoteles en San Miguel de Tucumán.
Nos cambiamos de ropa y le preguntamos a «Coya», el recepcionista diurno, dónde ir a comer empanadas tucumanas y qué ver en San Miguel de Tucumán un domingo. Nos mandó a un patio de comidas regionales a unas dos cuadras de la Plaza Independencia. Ahí comimos unas auténticas empanadas tucumanas, que estaban buenísimas, en un patio colonial digno de la histórica ciudad. Ahora sí, estábamos en Tucumán 😉
CASA HISTÓRICA DE LA INDEPENDENCIA
Después de comer fuimos al Museo de la «Casa Histórica de la Independencia» (¡no la llamen «casita»!). Se ubica en la peatonal Congreso de Tucumán 141.
La Casa Histórica es hoy un museo y centro cultural. Visitar San Miguel de Tucumán y no ir a la Casa Histórica sería como ir a Buenos Aires y no visitar la Plaza de Mayo. Es la visita obligada en la ciudad.
- Pueden consultar toda la información sobre la visita a la Casa Histórica en su sitio web.
El 9 de julio de 1816, sesionó en esta casa el Congreso de Tucumán. La sesión devino en la firma de la Declaración de Independencia. Pero eso lo sabemos todos. Vale la pena visitar la Casa Histórica para conocer otras curiosidades acerca de ella.
El museo tiene 3 patios, 8 salas abiertas, biblioteca, un laboratorio de restauración, un área de reserva de patrimonio, una galería de placas de homenajes, dos murales impresionantes, y su extensión abarca el largo de toda la manzana.
MERODEANDO POR EL CENTRO…
Después de visitar la Casa Histórica y la peatonal Congreso de Tucumán, visitamos un paseo de artesanos a pocos metros de allí y seguimos camino hacia el Museo Belgraniano, pasando por el Paseo de los Libertadores y la Plaza Belgrano.
En este caso nos sorprendimos con que el museo estaba cerrado (aparentemente, los museos de San Miguel de Tucumán cierran los domingos) así que nos limitamos a ver desde detrás de las rejas.
- El Museo Belgraniano está en la antigua Casa Belgraniania donde habitó Manuel Belgrano. Para más información pueden consultar el sitio web de Turismo de Tucumán.
Habiendo empezado a llover, caminamos hasta la Plaza Independencia, la principal de la ciudad. Alrededor de ella está el Palacio de Gobierno, la Catedral, de estilo clásico, la Secretaría de Turismo, y edificios coloniales muy lindos.
Esta es la zona centro de San Miguel de Tucumán. A pocos pasos están las peatonales Mendoza e Idelfonso de las Muñecas, que forman el principal centro comercial de la ciudad. Claro que, siendo domingo, no se veía interesante…
La plaza es el kilómetro 0 de la provincia de Tucumán y es muy elegante. La Casa de Gobierno de Tucumán se ubica en el mismo lugar en que yacía el antiguo Cabildo de Tucumán y su edificio tiene más de 100 años. En su sótano, una cripta alberga los restos de Juan Bautista Alberdi, que fueron trasladados allí desde el Cementerio de Recoleta. El edificio está abierto a visitas guiadas, pero aquel domingo estaba cerrado.
PARQUE 9 DE JULIO
En la Secretaría de Turismo frente a Plaza Independencia nos dieron mapas de la ciudad y nos orientaron sobre qué ver en los alrededores de San Miguel de Tucumán. El punto más famoso es el Cerro San Javier, al que se puede llegar en transporte público. Este es un interesante lugar donde hacer trekking, cabalgata, mountain bike, y parapente. Como el clima no ayudaba, y al día siguiente pariríamos camino a Tafí del Valle, decidimos quedarnos en la ciudad.
Pasando por la Basílica de la Victoria, caminamos en dirección este por la Avenida 24 de Septiembre. San Miguel de Tucumán está plagada de iglesias. Conformo nos alejamos de la Plaza Independencia, la ciudad se parece más a cualquier otra. Esto cambia al llegar al Parque 9 de Julio, el más grande la capital tucumana y uno de los puntos obligados que visitar en San Miguel de Tucumán. En él se hace el famoso desfile del Día de la Independencia.
Es un espacio enorme para relajarse y disfrutar la tarde mientras el clima lo permita. Hay un reloj floral, un rosedal, y un lago. También tienen ahí sus edificios algunas facultades de la Universidad Nacional de Tucumán. Se pueden encontrar bares y restaurantes, especialmente al mediodía y a la tarde.
Nuestro día en San Miguel de Tucumán terminó después de haber hecho 12 kilómetros a pie recorriendo la ciudad. No me encantó. Tampoco me disgustó, ya que considero que es una de esas ciudad que hay que visitar en Argentina, por lo que representa. Digamos que la capital tucumana es «peculiar»: no es una ciudad linda per se, pero al mismo tiempo me resultó distinta al resto de ciudades que conocí. Aunque, para ser justo, tampoco tuvimos tiempo de recorrerla bien ni suerte con el clima. Quién dice… quizá en algunos años regrese a San Miguel de Tucumán y la experimente mejor, con todo lo que tiene para ofrecer 😉
Lo cierto es que San Miguel de Tucumán es una excelente opción desde donde empezar un viaje por el noroeste argentino. ¡Buen viaje!
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