El Parque Provincial Ischigualasto est\u00e1 al noreste de San Juan, junto al l\u00edmite con La Rioja (y el vecino Parque Nacional Talampaya) en el norte de la regi\u00f3n de Cuyo. Ambos parques constituyen una enorme \u00e1rea resguardada como Patrimonio de la Humanidad<\/strong>. La raz\u00f3n de esto es que la evoluci\u00f3n terrestre se dio de manera tal que, en esta parte de Argentina, se aprecia un registro f\u00f3sil \u00fanico en el mundo y que permite a los expertos entender mejor la historia de la Tierra.<\/p>\n\n\n\n La entrada Ischigualasto est\u00e1 a poco m\u00e1s de 300 km de la ciudad de San Juan<\/a><\/strong>, desde donde se llega en auto en aproximadamente 4 horas. La localidad tur\u00edstica m\u00e1s cercana es San Agust\u00edn del Valle F\u00e9rtil, a 75 km, y desde este pueblo parten la mayor\u00eda de los tours a Ischigualasto. Al final del post les dejo la informaci\u00f3n sobre c\u00f3mo ir a Ischigualasto desde distintos puntos de San Juan y La Rioja<\/strong>.<\/p>\n\n\n\n La visita al Valle de la Luna<\/strong>, como se llama -err\u00f3neamente- a Ischigualasto, puede hacerse tambi\u00e9n en veh\u00edculo propio<\/strong> siguiendo una caravana de autos encabezada por el gu\u00eda. Esto tiene un costo de aproximadamente USD 10 por persona<\/strong> (ARS 450 a agosto de 2019) para argentinos residentes fuera de la provincia de San Juan. Hay descuentos para sanjuaninos, estudiantes universitarios, y jubilados<\/strong>.<\/p>\n\n\n\n El recorrido es de unos 40 km y demora 3 horas<\/strong>. Se hacen 5 paradas a lo largo de la visita<\/strong> mientras se recorren caminos de tierra rodeados de fauna (guanacos, zorros y vizcachas) que cruzan el lecho de r\u00edos arr\u00e9icos. En cada parada, el gu\u00eda a cargo nos pone en contexto del lugar y nos hace viajar en el tiempo hasta imaginar que ese desierto que estamos pisando fue alguna vez un gigantesco delta.<\/p>\n\n\n\n A la entrada al Parque Provincial Ischigualasto hay un centro de interpretaci\u00f3n<\/strong> donde se exhiben algunos de los f\u00f3siles<\/strong> encontrados en la zona. Entre estos ejemplares se encuentran los ancestros evolutivos de los dinosaurios -hallados en San Juan-, es decir, los primeros dinosaurios que habitaron la Tierra<\/strong>, los que dieron origen al resto… \u00a1y med\u00edan 45 cm x 100 cm! \u00a1S\u00ed, cent\u00edmetros!.<\/p>\n\n\n\n Tambi\u00e9n se puede recorrer un peque\u00f1o mercado de artesanos<\/strong> y comprar souvenirs o almorzar algo en el bar<\/strong> del parque antes de partir en la caravana para la visita guiada.<\/p>\n\n\n\n La primera parada es el Valle Pintado<\/strong>. El nombre deja poco a la imaginaci\u00f3n: el paisaje parece pincelado en tonos de gris. Lo vemos desde arriba mientras el gu\u00eda nos explica el origen del nombre Ischigualasto<\/strong>: en lengua cac\u00e1n, hablada por los pueblos n\u00f3mades que frecuentaban la zona, significa \u00abLugar sin vida\u00bb<\/strong>. Esto guarda relaci\u00f3n con el hecho de que los n\u00f3mades se encontraban con numerosos restos f\u00f3siles en el lugar, lo que atribu\u00edan a que a ese lugar se dirig\u00edan los animales a morir.<\/p>\n\n\n\n Esa imaginaria sensaci\u00f3n de \u00abpinceladas\u00bb es producida por la erosi\u00f3n que dej\u00f3 el agua en el terreno durante el tiempo en el que ah\u00ed hubo un delta. Esto fue hace millones de a\u00f1os, cuando no se hab\u00eda formado la Cordillera de los Andes. Ese ser\u00eda el suceso que modificar\u00eda aquel h\u00famedo paisaje para convertirlo en lo que hoy podemos apreciar, al bloquear la cordillera los vientos h\u00famedos provenientes del Pac\u00edfico.<\/p>\n\n\n\n El interior del Valle Pintado es la parte de Ischigualasto que fue denominada \u00abValle de la Luna\u00bb<\/strong>. Aunque el nombre que hace alusi\u00f3n a un paisaje lunar es comunmente usado para referirse a todo el Parque Provincial Ischigualasto, el gu\u00eda enfatiza que esto es un error. Valle de la Luna no es m\u00e1s que el nombre art\u00edstico que un fot\u00f3grafo le otorg\u00f3 al Valle Pintado por su coloraci\u00f3n gris (producto de la ceniza volc\u00e1nica en la tierra) hace m\u00e1s de 50 a\u00f1os.<\/p>\n\n\n\n La segunda parada es la Cancha de Bochas<\/strong>. Nuevamente, el nombre deja poco a la imaginaci\u00f3n, pero al llegar al mirador es imposible no sentirse desconcertado. \u00bfDe verdad nadie puso esas \u00abbochas\u00bb ah\u00ed? \u00bfEs esto alguna clase de trampa para turistas? \u00bfQu\u00e9 estoy viendo? <\/strong><\/p>\n\n\n\n Resulta que nadie puso esas formaciones ah\u00ed, y todo es obra de la Naturaleza<\/strong>. El nombre correcto de las \u00abbochas\u00bb es concreciones<\/strong>. Estas concreciones se formaron en el interior de sedimentos que yac\u00edan en el lecho de aquel antiguo delta y son acumulaciones de minerales, entre los que se destacan el magnesio<\/strong> y el silicio<\/strong>. Estos elementos se depositaron en el interior de rocas sedimentarias originando las concreciones y son m\u00e1s resistentes a la erosi\u00f3n que las rocas que las conten\u00edan. As\u00ed, la roca fue erosion\u00e1ndose hasta desaparecer, dejando las concreciones a la vista<\/strong> de los miles de turistas que cada a\u00f1o las fotograf\u00edan, asombrados.<\/p>\n\n\n\n Algunas concreciones se ven rajadas<\/strong>. Esto es consecuencia de la amplitud t\u00e9rmica<\/strong> del desierto particularmente en verano cuando, en el mismo d\u00eda, la temperatura m\u00e1xima puede superar los 40\u00b0C durante el d\u00eda y caer por debajo de los 10\u00b0C por la noche.<\/p>\n\n\n\n Cruzamos un lecho arr\u00e9ico<\/strong> antes de dirigirnos a la tercera parada del recorrido por Ischigualasto. Estos son figurita repetida en toda la regi\u00f3n, y no son m\u00e1s que el camino por el cual escurre el agua de lluvia. Al llover (algunos d\u00edas de verano) se generan r\u00edos arr\u00e9icos, es decir, que no nacen ni terminan en ning\u00fan lado: el agua simplemente se evapora o percola entre el \u00e1rido suelo.<\/p>\n\n\n\n A mi izquierda observo una extra\u00f1a formaci\u00f3n que me hace pensar en una esfinge<\/strong>.<\/p>\n\n\n\n \u00ab\u00a1A nuestra izquierda, la Esfinge!<\/em>\u00bb oigo decir al gu\u00eda a unos metros.<\/p>\n\n\n\n \u00abSoy tan original<\/em>\u00bb pienso, y subo al auto listo para seguir camino a la tercera parada: el Submarino<\/strong>.<\/p>\n\n\n\n El Submarino es una de las postales m\u00e1s conocidas de Ischigualasto, pero no fue lo que recordaba haber visto en fotos. Hace pocos a\u00f1os, una de las torres de esta formaci\u00f3n se derrumb\u00f3 y, seg\u00fan el gu\u00eda, la torre est\u00e1 a la espera de igual destino.<\/p>\n\n\n\n Desde este punto ya se observa m\u00e1s cerca una pared anaranjada en el horizonte<\/strong>, que nos viene acompa\u00f1ando desde la primera parada. Pol\u00edticamente se trata del l\u00edmite con la provincia de La Rioja. Geol\u00f3gicamente se trata de una capa sedimentaria distinta a las que venimos viendo en Ischigualasto. Resulta que Ischigualasto y Talampaya no solo son Patrimonio de la Humanidad por sus registros f\u00f3siles; tambi\u00e9n lo son por la forma en que 7 capas sedimentarias que forman las capas superficiales de la corteza terrestre quedaron desplazadas, una sobre otra, en orden cronol\u00f3gico<\/strong>. El gu\u00eda describe esto como un libro de historia geol\u00f3gica.<\/p>\n\n\n\n \u00abEs el Disney de los ge\u00f3logos: todos quieren venir ac\u00e1<\/em>\u00ab<\/strong>, resalta con una orgullosa sonrisa.<\/p>\n\n\n\n![\"Ruta](\"https:\/\/i0.wp.com\/espiritu-viajero.com\/wp-content\/uploads\/2019\/10\/Ruta-a-Ischigualasto-San-Juan.jpg?resize=800%2C337\")
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