Barracas no es el primer barrio en el que uno piensa a la hora de planear una visita a Buenos Aires. No tiene los monumentos de Recoleta, ni el modernismo de Puerto Madero, ni la vida nocturna de Palermo, pero Barracas tiene lo suyo. Es uno de los barrios más interesantes de Buenos Aires y vale la pena conocerlo para experimentar otra cara de Buenos Aires. Acá te cuento qué ver en Barracas 😉
Muchas veces pasé por Barracas, pero siempre lo había visto desde la ventana del colectivo 17, camino al centro porteño. Pero caminar toda la mañana por el barrio junto a una auténtica barraquense (mi amiga Cami) me sacó de mi ignorancia. Barracas resulta ser un barrio con mucha historia, mucho arte, lindos parques, y hasta un polo gastronómico que promete convertirse en uno de los mejores lugares donde comer en Buenos Aires.
SOBRE EL BARRIO DE BARRACAS
Barracas está ubicado en el sur de la ciudad de Buenos Aires. Se sitúa en la orilla norte del Riachuelo, frente al municipio de Avellaneda (antiguamente llamado Barracas al Sud). Durante el siglo XVIII se instalaron junto al Riachuelo varias barracas (sí, de ahí toma su nombre el barrio) donde se almacenaban cueros y carnes saladas que luego eran exportadas desde el puerto.
Hacia finales del siglo XIX, Barracas era el lugar donde la aristocracia tenía sus quintas y casonas. Fueron las epidemias de fiebre amarilla las que obligaron a gran parte de la población rica a desplazarse a barrios más al norte. Hoy seguramente cueste creer que este fue uno de los lugares más elitistas de la capital argentina, pero si se mira bien, los testimonios de aquel pasado están presentes en varias antiguas casonas.
El barrio cambió radicalmente con la llegada de los inmigrantes europeos a principios del siglo XX. Como gran parte del sur porteño, Barracas se convirtió en un distrito industrial y residencial de la clase obrera que creció hasta fines de ese mismo siglo, cuando muchas industrias abandonaron el país.
Hoy es un barrio principalmente de clase media, con todos sus matices. Muchas de las industrias abandonadas están siendo recuperadas para ser ocupadas por espacios de diseño. Barracas va camino a convertirse en el Distrito del Diseño de Buenos Aires, y está atravesando una transformación que cada vez la aleja más del abandono de hace algunas décadas. De hecho, ya funciona allí el Centro Metropolitano de Diseño (a dos cuadras de la estación Hipólito Yrigoyen del ferrocarril Roca). También, algunos viejos edificios industriales fueron reemplazados por outlets de ropa y oficinas. Sin embargo, la recuperación más notable es el Bulevard Caseros, que en la zona próxima al Parque Lezama está convirtiéndose en un elegante pero accesible polo gastronómico.
PARQUE PEREYRA
Podemos hablar de Barracas sectorizando al barrio en 3 zonas: el Oeste, la Avenida Montes de Oca, y la zona del Parque Lezama.
El primer lugar que visité junto con Cami fue el Parque Pereyra. Se trata de un amplio espacio verde, diseñado por el célebre Carlos Thays. Se encuentra al Oeste del barrio, en la intersección de las avenidas Iriarte y Vélez Sarsfield. Se trata de una zona urbana, de casas bajas, alejada de las principales conexiones de transporte público. No es la mejor zona para pasear, pero sí fue una buena forma de empezar a recorrer Barracas.
Frente al parque se encuentra uno de los seis templos católicos que tiene el barrio: la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús. Antiguamente, la zona pertenecía a la familia Pereyra Iraola, quienes cedieron tierras para la construcción del templo.
Pasamos por un diminuto barrio cerrado, separado del resto de Barracas por una reja verde. Es el Barrio Monseñor Espinosa, un barrio de 64 casas que siguen el mismo estilo distribuidas en 8 pabellones y que ocupa menos de una manzana. Aunque el barrio no está en la zona más cotizada de Barracas, las casas se venden por altas cifras en dólares.
La construcción del Barrio Monseñor Espinosa fue ordenada por la empresa constructora Sabaté en 1917. El terreno fue donado por Leandro Pereyra Iraola y hasta hubo una colecta nacional para financiar la construcción. Pueden leer la historia y el trasfondo social de este rincón de Barracas en este artículo del Diario Clarín.
AVENIDA MONTES DE OCA
De camino hacia el Este, cruzamos por debajo del viaducto del Tren Roca atravesando la zona urbana de casas bajas con veredas levantadas, testigos de la época en que el barrio se inundaba. Este escenario de veredas elevadas se repite también en La Boca y otras zonas que solían quedar totalmente anegadas tras las tormentas rioplatenses.
La Avenida Montes de Oca es el centro comercial de Barracas, y la columna vertebral del barrio. Junto a ella se ubican desde tiendas de ropa y confiterías hasta concesionarias de autos y oficinas. Es también la zona mejor cotizada para vivir en Barracas, por sus buenas conexiones de transporte. Este solía ser el antiguo camino junto al cual se ubicaban las quintas de la aristocracia.
El punto a visitar es la Plaza Colombia. No solo es una prolija y elegante plaza urbana, también tiene una interesante historia. El actual terreno que ocupa la plaza solía ser parte de la quinta de la familia Guerrero, una de las más acaudaladas de Buenos Aires en el siglo XIX.
No se puede hablar de la historia de Barracas sin mencionar la muerte de Felicitas Guerrero, alrededor de la cual circulan varios mitos y leyendas. Los libros de historia la mencionan como la dama más bella de la Buenos Aires de fines de siglo XIX. Fue asesinada por uno de sus pretendientes y, luego de su muerte, su familia cedió los terrenos detrás de su casa para la construcción de una iglesia: la Iglesia de Santa Felicitas.
La iglesia es un ícono de Barracas, otro de los tantos templos en el barrio, pero diferente al resto: nadie se casa en esta iglesia. Esto se debe a la creencia de que traería mala suerte, a partir de cómo fue asesinada Felicitas, y al hecho de que -se dice- su fantasma aún merodea esta iglesia.
Un túnel conectaba la iglesia con la quinta de los Guerrero. Hoy se lo puede visitar durante la Noche de los Museos, cuando se hacen visitas a la iglesia y se recuerda la historia de Felicitas.
La Avenida Montes de Oca gana altura cuanto más se acerca al norte. Nace en la intersección con la Avenida Caseros, que hace de «frontera» entre el barrio de Barracas y San Telmo. Antiguamente estaba adoquinada y se cobraba un peaje para circular sobre ella. Poco duró este negocio, ya que la gente dejó de pagar el «peaje» debido al nulo mantenimiento que se le hacía al adoquinado.
Las zonas cercanas a la Avenida Montes de Oca son residenciales y es normal encontrar varios templos (de varias religiones, por cierto) y antiguas casonas que recuerdan al pasado del barrio. Pero lo más interesante que ver en Barracas está a unas calles de esta avenida: el Pasaje Lanín.
PASAJE LANÍN: LOS COLORES DE BARRACAS
Nuevamente cruzamos por debajo de la autopista 9 de julio, esta vez por la Avenida Suárez, y caminamos hasta la intersección con la calle Salmún Feijóo. Al principio la zona no parecía interesante, pero todo cambió cuando encontramos la intersección con la calle Lanín.
La calle Lanín está adoquinada y no sigue una trayectoria recta. Es una zona residencial, pero nada se parece a los edificios de departamentos ni casas antiguas de Barracas.
Todo es colorido. Muy colorido. Las fachadas forman parte de una intervención artística realizada por el artista Marino Santa María. Este artista argentino realizó varios trabajos de arte urbano en varias ciudades del país. Comenzó adornando la fachada de su taller en Barracas con mosaico veneciano y mucho color, pero a los vecinos les gustó tanto que dieron permiso de intervenir las fachadas de más de 30 casas.
La idea de Marino Santa María no era transformar este rincón de Barracas en nuevo Caminito. Era importante que la calle Lanín no perdiera su esencia de calle de barrio, y esa es justamente la belleza del lugar: mucho color y mucha tranquilidad.
Visitar Barracas es una buena oportunidad para conocer una cara más tranquila de Buenos Aires. Es una barrio no turístico, pero que tiene el potencial de entretener a los visitantes con su arte, oferta gastronómica, y hasta cultural. Limita con los sumamente turísticos barrios de San Telmo y La Boca, y se lo puede empezar a recorrer desde la Estación Constitución sin problemas. No hay excusas para no darle a Barracas la oportunidad que merece.
AVENIDA CASEROS & PARQUE LEZAMA
La Avenida Caseros divide a los barrios de San Telmo y Barracas. Entre las calles Chacabuco y Defensa está viendo surgir un polo gastronómico elegante y tranquilo, con buenos precios. Hay restaurantes, bares, y hasta hoteles. Personalmente, es de mis lugares favoritos donde salir a tomar algo en Buenos Aires.
En la esquina de Av. Caseros y Defensa está el Museo Histórico Nacional. Aunque técnicamente se encuentra en el barrio de San Telmo, no puedo dejar de nombrarlo como uno de los lugares que ver en Barracas. Es uno de los tantos museos gratuitos de Buenos Aires (los días miércoles) y uno de los más lindos. Ocupa el antiguo palacio de estilo colonial que sirvió de residencia del acaudalado comerciante José Gregorio Lezama. Pueden acceder a toda la información sobre la visita al museo en su sitio web.
Por supuesto que después de una interesante visita al Museo Histórico Nacional, no pueden perderse de dar un paseo por el Parque Lezama, uno de los parques más lindos de Buenos Aires 😉
Info para visitar Barracas:
- No hay subtes que lleven al barrio. Desde el centro porteño, lo mejor es llegar a la Estación Constitución de la Línea C del subte y caminar hasta el inicio de la Avenida Montes de Oca o la Avenida Caseros (3 cuadras).
- Las líneas 10, 12, 17, 20, 22, 70, 74, 93 y 102 de colectivos conectan Barracas con otros barrios porteños.
- No dejes de leer mi Guía para viajar en transporte público en Buenos Aires.
- La zona de Avenida Caseros tiene varios hoteles y es una zona económica donde alojarse en Buenos Aires. Pueden leer mi guía sobre Dónde dormir en Buenos Aires.
- Es una buena opción combinar Barracas con una visita a Caminito y La Boca.
- La Plaza Colombia está a 9 cuadras del Estadio de Boca (por calle Brandsen).
- La Avenida Montes de Oca está a 9 cuadras de Caminito (por calle Magallanes).
- Las zonas al oeste del Parque Pereyra y al sur de la Avenida Iriarte no son precisamente conocidas por ser las más seguras de la ciudad. Dato a tener en cuenta.
- La estación Hipólito Yrigoyen es la única estación de trenes del barrio. Se llega desde la estación Constitución con los ramales vía Temperley del tren Roca.
- Pueden contratar un tour guiado por Barracas para conocer mejor este barrio, en grupo.
Muy bueno el comentario. Gracias por la info hoy comienza mi recorrido por Barracas.
Buen árticulo, te faltó mencionar a el bar El Progreso que es uno de los cafes notables de la ciudad.
Gracias por el dato, Adrian!
Muy buena descripción de un hermoso barrio. Es bueno que des este pantallaso para que la gente vea que la ciudad no solo se basa en los moderno y elegante de Recoleta, Palermo y Puerto Madero.
La verdad que sí, Barracas me dejó contento! Gracias por el comentario!
En Barracas también se encontraba » La casa de los Masones » sobre la calle San Antonio..una historia muy interesante